La Policía de Wisconsin (EE.UU.) arrestó a un fugitivo que había estado escondido en un búnker improvisado por más de tres años.
Jeremiah Button, de 44 años, desapareció en febrero de 2016, a unas pocas semanas de que fuera juzgado por agresión sexual infantil y posesión de pornografía infantil. El hombre fue encontrado por un cazador que se topó con el refugio subterráneo, ubicado en el pueblo de Ringle, en el condado de Marathon, y dio aviso a las autoridades el pasado 9 de agosto.
Los oficiales describieron el lugar como una especie de búnker autosostenible camuflado bajo una espesa capa de maleza. Estaba equipado con paneles de energía solar que alimentaban a tres baterías de automóvil, luces LED, ventiladores y todo tipo de artilugios electrónicos, entre ellos una radio y un televisor. Además, también poseía un generador de electricidad a pedales que Button utilizaba cuando no había suficiente luz solar.
Según las autoridades, Button les contó que construyó el refugio a medida que se acercaba el día del juicio. También indicaron que era lo suficientemente pequeño como para mantenerse cálido en invierno y fresco en verano. El hombre espera una comparecencia previa a su juicio a mediados de setiembre.