Ciudad de México es conocida como la ciudad de los palacios porque alberga verdaderas joyas arquitectónicas que asombran a los millones de turistas que cada año la visitan. Pero la capital mexicana cuenta también con un recorrido de antimonumentos, una serie de estructuras levantadas principalmente por familiares de víctimas de desaparición forzada, asesinatos o tragedias con el fin de exigir justicia.
Hasta el momento, Ciudad de México cuenta con seis antimonumentos. El primero se encuentra en una jardinera de la plaza de la Constitución, y fue colocado para recordar a las víctimas de la matanza de estudiantes y civiles perpetrada por las fuerzas de seguridad el 2 de octubre de 1968 durante una manifestación en la capital mexicana.
El siguiente antimonumento se erigió frente al Palacio de Bellas Artes. Esa obra, denominada 'Antimonumenta', fue colocada por activistas y grupos feministas para recordar que en ese país diariamente nueve mujeres son asesinadas.
Mientras que en la céntrica avenida Reforma se encuentran dos antimonumentos. El primero recuerda el secuestro y desaparición en enero de 2015 de los jóvenes David Ramírez y Miguel Rivera, un caso que sigue sin resolverse. Cerca fue levantada otra estructura en acero, en memoria de los 43 jóvenes estudiantes de Azoyzinapa desaparecidos en septiembre del 2014 en Iguala, Guerrero. El caso de la desaparición forzada, cometida por elementos de la Policía local en contubernio con miembros del crimen organizado, permanece en la impunidad.
Frente a la Bolsa Mexicana de Valores se encuentra el antimonumento dedicado a los 65 mineros muertos en la mina Pasta de Conchos, en Coahuila, tras una explosión en febrero de 2016. De acuerdo con sus familiares, los mineros no murieron por un accidente, sino por las precarias condiciones de seguridad y mantenimiento de la mina.
También en la avenida Reforma se puede ver la obra denominada '49 ABC', levantada por los padres de los 49 niños que perdieron la vida en junio del 2009 en un incendio en una guardería en la localidad de Hermosillo (Sonora). El fuego se inició en unas instalaciones aledañas pertenecientes al Gobierno estatal, pero se propagó rápidamente a la guardería. Pesa a que 19 personas fueron procesadas por ese caso, ninguna de ellas fue encarcelada.