A través del recién nombrado embajador de EE.UU. en México, Christopher Landau, el presidente Andrés Manuel López Obrador solicitó al Gobierno estadounidense que aplique un "castigo ejemplar" al responsable del tiroteo en El Paso, Texas, que el pasado 3 de agosto dejó un saldo de 22 personas muertas y 24 heridas.
Asimismo, López Obrador pidió a su homólogo estadounidense, Donald Trump, manifestarse todos los días contra el odio hacia los mexicanos. La petición del mandatario fue durante una reunión privada este lunes en Palacio Nacional para recibir las cartas credenciales de los también embajadores de la República Checa, Ecuador e Israel.
En los encuentros estuvo presente el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, quien al concluir las reuniones explicó que el Gobierno de México fue enfático en solicitar que EE.UU. aplique un castigo ejemplar para el responsable de la masacre.
"En el tema de El Paso, de lo que es xenofobia, odio y demás, el presidente le hizo saber (al embajador) que estamos muy atentos a lo que está ocurriendo, que pensamos que este caso será muy decisivo para que no se repitan ese tipo de hechos, que se haga justicia, pero que también haya un pronunciamiento más amplio en el sentido de que no se toleren estas conductas, estas actitudes", resumió Ebrard.
"El embajador dijo que entendía perfectamente ese planteamiento. Le dijimos: 'como usted sabe, estamos trabajando varios recursos legales y vamos a seguir adelante en ellos, pero es importante que el Gobierno de Estados Unidos manifieste claramente que está en contra', y él dijo 'sí, ya lo hemos hecho', (le dijimos) 'bueno háganlo todos los días, háganlo más, y sobre este caso sean ejemplares con lo que van hacer'", dijo el canciller a medios reunidos al exterior de Palacio Nacional.
Ebrard aseveró que su país reiteró el pedido de extradición de Patrick Crusius, el atacante de El Paso, quien confesó que "apuntaba contra los mexicanos".
Este domingo se dio a conocer que en el Senado mexicano se presentará esta semana una iniciativa de reforma para incorporar en el marco legal nacional elementos que permitan que actos de terrorismo en contra de mexicanos, como el ocurrido en El Paso, Texas, puedan ser sancionados en el país latinoamericano, conforme a los instrumentos jurídicos internacionales.
Según datos presentados por el Buró Federal de Investigaciones (FBI), en el periodo comprendido entre 2007 y 2017 se contabilizaron 6.357 víctimas por crímenes de odio dirigidos en contra de la comunidad latina, a causa de su origen étnico.