Tras la liberación este lunes de Gildardo López Astudillo, alias 'El Gil', presunto autor de la desaparición y muerte de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, ocurrida en 2014 en Iguala (Guerrero, México), tras quedar absuelto por el delito de secuestro, las familias señalaron que el hecho confirma el fracaso en la investigación.
Asimismo, manifestaron que la sentencia absolutoria es consecuencia de "irregularidades y violaciones graves a derechos humanos" por la Fiscalía General de México en la anterior Administración, que también consideran que el actual Gobierno "no ha tomado ninguna medida para corregir las deficiencias en las acusaciones", por lo que existe el riesgo de que sean absueltos más acusados que presumiblemente cuentan con información sobre el paradero de los estudiantes.
El 26 de septiembre de 2014, un grupo de estudiantes de la Escuela Normal Rural tomó varios autobuses en Iguala para dirigirse a la Ciudad de México y participar allí en una protesta, cuando un grupo de policías locales e individuos armados abrieron fuego contra ellos. Seis personas fallecieron, 17 resultaron heridas y, hasta el día de hoy, 43 estudiantes permanecen desaparecidos.
Un año más tarde, 'El Gil' fue detenido luego de que su predecesor, Casarrubias Salgado, revelara a la Justicia detalles durante su arresto en relación con los hechos delictivos.
Según la versión oficial del Gobierno, los jóvenes fueron detenidos por agentes de Policía y luego entregados a sicarios de la organización criminal Guerreros Unidos, quienes los asesinaron e incineraron en un basurero de la comunidad de Cocula. Supuestamente, los perpetradores mantuvieron la hoguera durante varias horas hasta que los huesos se convirtieron en ceniza y los restos fueron metidos en bolsas de plástico y tirados al río.
Sin embargo, la investigación del caso y la versión oficial han sido puestas en tela de juicio en más de una ocasión, tanto por las familias de las víctimas como por expertos independientes. La tragedia, que no solo conmocionó a México sino también a la comunidad internacional, ha motivado la celebración de varias marchas en el país para reclamar justicia.