El fabricante estadounidense de aviones Boeing prepara reformas diseñadas para aumentar la seguridad en el diseño y construcción de sus aeronaves, después de los fatídicos accidentes de dos de sus aviones de modelo 737 MAX, según recoge The New York Times citando una fuente anónima de la compañía.
Las fuentes indicaron al diario que durante los últimos cinco meses un pequeño comité ha estado trabajando en estos nuevos planes de seguridad y apuntan a que estarían listos para presentarse durante la próxima semana.
Dentro de las recomendaciones significativas se incluyen el cambio de la estructura corporativa, la creación de un nuevo grupo de especialistas que supervisará y coordinará las tareas en los diversos departamentos y además el cambio de las cabinas de los futuros aviones para dar cabida a una nueva generación de pilotos, algunos de los cuales pueden tener menos entrenamiento. A pesar de que esta reforma retrasará el proceso de creación de nuevos aviones, indican que ayudará a eliminar problemas en la etapa de desarrollo de los aparatos.
Tragedias
El pasado 10 de marzo, el vuelo ET302 de Ethiopian Airlines, un Boeing 737 MAX 8 con destino a Nairobi (Kenia), se estrelló cerca de Bishoftu (Etiopía) apenas seis minutos después de despegar del aeropuerto internacional Bole de Adís Abeba, la capital del país. En el siniestro perecieron las 157 personas que iban a bordo, de 33 nacionalidades distintas.
A finales de octubre de 2018, otro Boeing 737 MAX 8 de la aerolínea indonesia Lion Air se precipitó al mar de Java, acabando con la vida de 189 personas.
A raíz de ambos siniestros, aerolíneas y gobiernos de todo el mundo suspendieron las operaciones de dicha aeronave. Sin embargo a finales de agosto el vicepresidente de 'marketing' de Boeing, Randy Tinseth, anunció que la compañía tiene programado que las aerolíneas vuelvan a operar con los 737 MAX para el cuarto trimestre de este año.