Las Fuerzas Armadas de EE.UU. están tratando de resolver el problema de que sus satélites más importantes, todos ellos de gran tamaño y fácilmente localizables, están desprotegidos ante las modernas armas antisatélite, según el portal Quartz.
El Pentágono ha contratado al fabricante de satélites Ball Aerospace y al negocio de servicios en la nube de Microsoft, Azure, para desarrollar una red de 20 satélites e infraestructura informática.
Se prevé que estos satélites sean desplegados en 2021 y que las compañías informáticas involucradas en el proyecto utilizarán nuevas antenas satelitales para extraer datos de satélites militares directamente a los centros de datos de Microsoft.
Los militares estadounidenses aprecian el mayor peligro para sus comunicaciones vía espacio con sus bases lejanas en el armamento antisatélite de Rusia, China e India.
El proyecto ve la solución en que varias compañías informáticas, muchas de ellas emergentes, desarrollen redes satelitales pequeñas, más rápidas y que vuelen en órbitas bajas de la Tierra.