Mientras elogiaba este el trabajo del programa espacial estadounidense, que pretende enviar una nueva misión tripulada a la Luna en 2024, el presidente de EE.UU., Donald Trump, dejó en claro este viernes que el objetivo final del país es llegar a Marte, informa Reuters.
"Nos vamos a Marte", aseguró el mandatario durante una rueda de prensa tras su reunión con el primer ministro de Australia, Scott Morrison, sugiriendo que el planeta rojo es un objetivo más emocionante que la Luna.
"La Luna es en realidad una plataforma de lanzamiento. Por eso es que paramos en la Luna. Dije: 'Oye, ya hemos hecho la Luna. Eso no es tan emocionante'. Dijeron: 'No, señor, es una plataforma de lanzamiento para Marte'. Así que haremos la Luna, pero en realidad haremos Marte", dijo el jefe de la Casa Blanca.
El marzo pasado, el vicepresidente del país norteamericano, Mike Pence, ya anunció el plan de llevar nuevamente astronautas a la Luna dentro de los próximos cinco años, explicando que lo primero que se haría sería establecer una base permanente en la superficie lunar para poder llevar misiones hasta Marte o más allá, recuerda The New York Times.
Apoyo internacional
Sin embargo, la NASA no se encuentra sola para concretar este ambicioso proyecto, al que esta semana se sumó la Agencia Espacial Australiana. El primer ministro Morrison aseguró que su país invertirá cerca de 101 millones de dólares en empresas australianas y nuevas tecnologías que impulsen el programa espacial estadounidense.
El programa espacial de la NASA Artemis consiste en el desarrollo del cohete espacial Megarocket y de la nave espacial Orion para viajes de ida y vuelta hacia la Luna. También se trabaja en el proyecto Lunar Gateway, con el que la agenda pretende explorar la superficie lunar.