Rusia, Turquía e Irán facilitarán la primera reunión del Comité constitucional sirio que, según está previsto, tendrá lugar a finales de octubre. Este organismo, gestado en 2018, contará con representación equitativa del Gobierno de Siria, la oposición y representantes de la sociedad civil.
Su creación fue aplaudida por numerosos países y organizaciones: desde EE.UU. y Alemania, hasta la Liga Árabe y la Unión Europea y la ONU. Y si bien se trata de un importante paso para poner fin a casi una década de conflicto en Siria, la lucha contra el terrorismo aún no acaba y las fuerzas gubernamentales continúan recibiendo instrucción por parte de asesores militares rusos.
RT presenció uno de sus entrenamientos en un polígono en las afueras de Damasco. En este lugar, los efectivos del Ejército gubernamental afianzan y perfeccionan sus habilidades de lucha contra los extremistas. Y es que, a pesar de que hoy día los yihadistas ya no representan una fuerza tan sólida como antes, todavía quedan algunos focos que deben ser derrotados por completo.
Uno de los puntos clave en esos entrenamientos es la participación de los expertos militares rusos que han venido hasta aquí para ayudar y enseñar a sus colegas sirios diversas habilidades, tales como la de desactivar minas, un tipo de artefactos que con frecuencia dejan atrás los extremistas cuando huyen de las ciudades.
En los ejercicios participa también la maquinaria pesada, incluyendo los carros de combate, y se efectúan entrenamientos de combate a gran escala con ayuda de lanzagranadas y sistemas lanzacohetes, así como otro tipo de armamento pesado.
A pesar de ser un simulacro, todas las municiones utilizadas por los soldados son reales. De esta manera, las unidades creadas con ayuda de asesores rusos rápidamente están listas para entrar en combate.
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