Varios empresarios relacionados con Rudy Giuliani, abogado personal de Donald Trump, emplearon sus conexiones con el letrado y el presidente de EE.UU. para intentar beneficiarse en Ucrania, informa la agencia AP.
Dos personas familiarizadas con este asunto aseguran que un círculo de patronos y donantes del Partido Republicano de EE.UU. promocionó sus nexos con el exalcalde de Nueva York y el inquilino de la Casa Blanca mientras trataba de imponer un consejo de administración en una compañía estatal de gas ucraniana.
Al parecer, el plan de estas personas consistía en dirigir contratos lucrativos a compañías controladas por aliados de Trump para lucrarse con esas operaciones.
Así, el secretario de Energía de EE.UU., Rick Perry, habría incluido en una lista de candidatos a la junta directiva de Naftogaz a un hombre que donó dinero a su partido en el pasado, aunque no queda claro si este alto cargo norteamericano estaba coordinado con los aliados de Giuliani.
Por su parte, una portavoz del Departamento de Energía de EE.UU. destacó que Perry no promovió sus intereses personales, sino que sus conversaciones con funcionarios ucranianos sobre Naftogaz formaron parte de sus esfuerzos para reformar el sector energético de Ucrania y crear un ambiente en el que las empresas occidentales puedan hacer negocios.