Médicos rusos operan a una bebé de EE.UU. para quitarle una mancha oscura que le cubre casi todo el rostro
Médicos de un centro especializado de la ciudad sureña rusa de Krasnodar realizaron con éxito la primera operación para quitar del rostro de Luna Fenner, una bebé estadounidense de 7 meses de edad, una mancha oscura que podría convertirse en un tumor maligno.
Se trata de una condición de piel bastante rara (uno entre 20.000) que se conoce como 'nevus melanocítico congénito gigante'. Las neoplasias de este tipo son muy inestables y pueden convertirse en un tumor maligno: melanoma. Médicos en EE.UU. habían explicado a los padres de Luna que se puede eliminar con un tratamiento largo y altamente costoso: unas 80 operaciones en cinco años.
Los médicos rusos de la clínica especializada en terapia fotodinámica con láser de Krasnodar se enteraron del caso de Luna Fenner a través de la Red y ofrecieron a sus padres otro tipo de tratamiento: no invasivo y que consiste en 6-8 operaciones. Esto llevará de un año a un año y medio, teniendo en cuenta los períodos de rehabilitación entre las etapas, cuando la pequeña con su madre, Carol Fenner, puede regresar a EE.UU.
"La niña se siente bien"
La semana pasada, ambas llegaron a Krasnodar, donde conocieron al cirujano oncólogo principal de la clínica, Pável Popov. Este especialista en cirugía láser declaró ante los periodistas que en seguida congenió con su paciente: al ver al médico la bebé extendió sus manos hacia él y permitió ofrecerle su botellita de alimentación.
De acuerdo con las declaraciones del director ejecutivo de la clínica, Andréi Aleksutkin, la primera operación, que duró una hora, se efectuó según el plan previsto, sin complicaciones y bajo anestesia local.
"La niña se siente bien. Ahora lleva un vendaje estéril. Está en casa [en Krasnodar]. Todos los días la estamos monitoreando", ha contado a RIA Novosti. El médico ha especificado que por el momento trataron la piel en la frente de la niña, hasta las cejas, y actualmente están determinando el ritmo de la regeneración de tejido para ajustar con mayor precisión el tiempo de tratamiento de Luna.
"La niña come, bebe. No ha tenido edema ni fiebre, ni nada que podría causar algún tipo de preocupación", ha concluido Aleksutkin.
En la última publicación en la cuenta de Instagram, creada para Luna por sus padres, la bebé aparece sonriente y despreocupada, con el vendaje en su frente.
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