La entidad financiera JP Morgan rebajó la calificación de las acciones chilenas tras varios días de protestas y recomendó venderlas: "Una combinación de macro poco atractivo, con pobres opciones de abajo hacia arriba, costosas valoraciones y ahora, inestabilidad sociopolítica agregada, nos hizo tomar nuestras ganancias en Chile".
Desde hace más de una semana que el país sudamericano atraviesa una serie de movilizaciones para exigir el cumplimiento de ciertas demandas sociales. Como resultado, hubo disturbios y enfrentamientos con la Policía, dejando un saldo de 18 muertos. Finalmente, el Gobierno de Sebastián Piñera anunció que garantizará algunos beneficios en el sistema de pensiones y salarios.
"Los eventos actuales exacerban la incertidumbre"
En ese contexto, tras un fin de semana plagado de tensión social, el lunes fue el peor día para la bolsa chilena en los últimos dos años: tuvo una caída cercana al 5 %, aunque el martes subió 1 %. Además, el grupo estadounidense precisó que las firmas de supermercados ligados a los saqueos son las más propensas a sufrir pérdidas en el mercado bursátil. En esa línea, consideraron que "los eventos actuales exacerban la incertidumbre doméstica".
No obstante, la consultora Capital Economics sostiene que por el momento es "improbable que las protestas en las principales ciudades de Chile tengan un impacto significativo en la actividad económica".
- Moody's afirma que caerá el consumo
Por su parte, Moody's, una reconocida calificadora de riesgo, sostiene que los recientes incidentes repercutirán negativamente en el crecimiento: "El cierre de comercios, la paralización del transporte, la interrupción del suministro de bienes y la inseguridad en las calles tendrán un impacto en la actividad económica en octubre", sostuvo Alfredo Coutiño, director del área de estudios. En esa línea, estimó que ello afectará "los precios al consumidor y los índices de consumo".
- Especial atención a las posibles reformas
Por otro lado, JP Morgan también advirtió que el proyecto para reducir la jornada laboral a 40 horas semanales, impulsado por el Partido Comunista, podría aumentar en un 10 % el costo para las empresas.
Además, la firma norteamericana señala que, si bien es cierto que el Ejecutivo cuenta con margen económico para responder a las demandas sociales de las últimas horas, hay que prestar especial atención a la disputa parlamentaria por las reformas que quiere impulsar el Gobierno sobre el empleo y el sistema de pensiones. Sobre ello, destacan que hay una oposición fuerte en el Congreso.