El ministro de Minería de Bolivia, César Navarro, y el ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, han renunciado este 10 de noviembre.
"Hoy más que nunca necesitamos que el país regrese al camino de la paz social y de la unidad. Pensando en el bien nacional y el respeto a la vida, hago pública mi renuncia irrevocable al cargo de ministro de Hidrocarburos", declaró Luis Alberto Sánchez a través de su cuenta en Twitter.
Mientras tanto, César Navarro confirmó su renuncia al diario El Deber.
El mismo paso fue dado por el presidente de la Cámara de Diputados del país, Víctor Borda.
Asimismo, la Fiscalía General de Bolivia ha anunciado este domingo un proceso contra los miembros del Tribunal Supremo Electoral por "presuntos hechos irregulares". La Fiscalía ha señalado que las "muy graves" irregularidades detectadas por la OEA pueden conllevar "ilícitos penales y electorales vinculados al cómputo de los resultados oficiales".
Horas antes, el presidente Evo Morales convocó a nuevas elecciones nacionales "que mediante el voto permitan al pueblo boliviano elegir democráticamente a sus nuevas autoridades, incorporando a nuevos actores políticos" y anunció su decisión de renovar la totalidad de vocales del Tribunal Supremo Electoral.
"En las siguientes horas la Asamblea Legislativa Plurinacional, en acuerdo con todas las fuerzas políticas, establecerá los procedimientos para ello", ha aseverado el presidente.
Asimismo, el presidente ha hecho un llamado a "bajar toda la tensión" en el país, diciendo que "todos tenemos la obligación de pacificar a Bolivia".