El hasta hoy presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha anunciado su dimisión a la Comisión Ejecutiva Nacional del partido, reunida tras la debacle electoral sufrida este domingo por la formación de centro-derecha.
Así, este lunes, Rivera ha anunciado tres decisiones: "os políticas y una personal". En primer lugar ha anunciado que deja de liderar su formación; en segundo lugar, ha informado de que renuncia a su acta de diputado en el Congreso; y por último, ha comunicado que se retira completamente de la política y de la vida pública.
El motivo de estas decisiones está en los resultados de los comicios celebrados este 10 de noviembre, que se han traducido en una fuerte reducción de la representación parlamentaria de Ciudadanos, que ha pasado de tener 57 escaños a quedarse solo con 10, tras obtener dos millones y medio de votos menos (una reducción del 60 %) que en la anterior cita con las urnas, celebrada el pasado 28 de abril.
Ya en la noche electoral del domingo, cuando el escrutinio de los votos no dejaba lugar a dudas, Rivera definió el de Ciudadanos como "un mal resultado sin paliativos y sin excusas", y anunció esta reunión de la Ejecutiva del partido en la que ha presentado su renuncia.
El ya exlíder de la formación naranja anunció asimismo la celebración de un congreso extraordinario en el que "los militantes tomen las riendas" del partido.
En los comicios de este domingo el Partido Socialista (PSOE) de Pedro Sánchez se proclamó vencedor, con 120 escaños, muy lejos de los 176 necesarios para gobernar. Le sigue el Partido Popular (PP), que se reforzó en la segunda posición y obtuvo 88. Entre los aspectos más destacados de la noche electoral figura el notorio ascenso de la formación ultraderchista Vox, que ha pasado de tener 24 a 52 escaños y se sitúa como tercera fuerza política del país; así como la mencionada debacle de Ciudadanos. Podemos, por su parte, ha perdido 7 escaños y se queda con 35 representantes parlamentarios.
De tercera a sexta fuerza en el Congreso
El hundimiento electoral del partido de Albert Rivera se ha producido en las cuartas elecciones generales que España celebra en cuatro años. Se ha tratado de una repetición electoral, después de que tras la anterior cita del 28 de abril los grupos parlamentarios no consiguieran llegar a acuerdos para investir a un presidente del Gobierno.
Ciudadanos tuvo en esa ocasión la llave para garantizar un Ejecutivo presidido por Sánchez al ser la tercera fuerza del Hemiciclo. Ahora, que se ha convertido en la sexta formación de la Cámara, sus escaños también podrían ser clave para investir al candidato socialista sin necesidad de acudir al apoyo de los partidos independentistas catalanes.