El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó este martes que Evo Morales sigue siendo el presidente de Bolivia, pues su renuncia no ha sido "constitucionalmente aceptada".
Durante la clausura del Congreso Internacional Afrodescendiente, el Jefe del Estado venezolano reiteró su convicción de que el golpe de Estado contra Morales fue una acción financiada por EE.UU. contra el pueblo de Bolivia.
Horas antes, Maduro denunció que Washington fue el promotor del golpe que condujo a la salida del presidente boliviano. "La mirada de Donald Trump fue de venganza, de odio y dio la orden de derrocar y acabar con el indio […] y se montó la emboscada", expresó.
Por esa razón, Maduro aplaudió el gesto del Gobierno de México de acoger al presidente depuesto de Bolivia y darle asilo político. "Han salvado la vida de Evo", dijo en alusión al pueblo mexicano y al mandatario Andrés Manuel López Obrador, luego que Morales aterrizara este día en la nación latinoamericana tras un viaje de 16 horas en un avión del Ejército mexicano.
El presidente venezolano también instó a las fuerzas militares de Bolivia a restituir el hilo constitucional, y destacó que Morales "es el único que puede garantizar la paz".
El líder de la República bolivariana acotó que el pueblo boliviano se ha movilizado contra el golpe de Estado e informó que había hablado personalmente con Morales, a quien encontró confiado.
Este lunes, cientos de personas se reunieron en el centro de Caracas para manifestarse a favor de Evo Morales y defender la democracia en Bolivia.
Las fuerzas políticas del chavismo y los movimientos sociales se congregaron cerca del Palacio de Miraflores con consignas de apoyo a la democracia y denunciando el golpe de Estado en Bolivia.