El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha mantenido este miércoles una reunión "maravillosa y muy productiva" con el mandatario turco Recep Tayyip Erdogan. En una rueda de prensa conjunta, Trump ha asegurado que los dos países podrían resolver sus discrepancias por la compra por Ankara de los sistemas rusos de defensa aérea S-400.
Para el mandatario estadounidense, la adquisición por Turquía de los S-400 plantea un desafío muy serio para Washington, pero Ankara sigue siendo un gran aliado de la OTAN, un importante colaborador en la lucha contra el terrorismo y, además, un gran socio comercial que ha hecho "tremendos avances" para lograr que el volumen del comercio bilateral alcanzara los 100.000 millones de dólares.
Programa F-35
Por su parte, Erdogan señaló que solo mediante el diálogo Ankara y Washington pueden superar los desafíos que enfrentan el sistema S-400 y el programa F-35.
De la misma manera, precisó que Turquía podría comprar los sistemas estadounidenses de defensa aérea Patriot "bajo circunstancias adecuadas".
Crisis en Siria y lucha contra el terrorismo
El inquilino de la Casa Blanca dejó en claro su satisfacción con la cooperación turca para hacer frente al terrorismo, mencionando además que él y Erdogan acordaron que Ankara continúe defendiendo "lo que se supone que debe defender" en Siria.
Trump recordó que la nación norteamericana ha mantenido una excelente relación con los kurdos, los principales socios de Washington en la lucha contra el Estado Islámico. Además, respecto a la crisis en Siria sostuvo que Europa debería pagar más para cubrir los costos relacionados con los refugiados sirios ya que "Turquía ha estado pagando la mayor parte".
La nación turca ha estado incrementado su gasto en defensa y está próxima a hacer una contribución del 2 % de su PIB a la OTAN, algo que en esta jornada el mandatario estadounidense mencionó con gran satisfacción a pesar de las grandes diferencias que han tenido los dos países en los últimos meses. Sobre todo, después de que Ankara iniciara una acción transfronteriza contra las milicias kurdas, aliadas de EE.UU., anulando la presencia del Ejército estadounidense en la región.