El secretario de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper, de visita en Corea del Sur, ha presionado este viernes a Corea del Sur para que pague más por la presencia de tropas estadounidenses en la península y para mantener vigente el pacto de intercambio de inteligencia de Corea con su otro aliado asiático, Japón, que Seúl está a punto de abandonar.
Reunido con su homólogo de Corea del Sur, Jeong Kyeong-doo, Esper también señaló que los dos países deben ser flexibles para modificar sus ejercicios militares conjuntos para apoyar los esfuerzos diplomáticos que pretenden poner fin al programa nuclear de Corea del Norte, informa Reuters.
Corea del Sur "es un país rico y podría y debería pagar más" por el despliegue del Ejército estadounidense en el país, apostilló Esper ante los periodistas tras la reunión.
Washington y Seúl están negociando un acuerdo para cubrir los costos del próximo año de presencia del contingente militar estadounidense de 28.500 efectivos en la península.
Un legislador surcoreano aclaró la semana pasada que la Administración estadounidense está exigiendo el pago de 5.000 millones de dólares, más de cinco veces más que lo acordado con Seúl para el año en curso.