Uno de los principales testigos en el proceso de 'impeachment' contra el presidente Donald Trump, el embajador de EE.UU. ante la Unión Europea, Gordon Sondland, confirmó inequívocamente la existencia de un 'quid pro quo' en el caso investigado durante su declaración de apertura este miércoles ante el comité de juicio político en la Cámara de Representantes.
Según Sondland, el abogado de Trump, Rudolph Giuliani, comunicó a varios altos funcionarios estadounidenses y ucranianos "que el presidente Trump quería una declaración pública del presidente [ucraniano Vladímir] Zelenski comprometiéndose a investigar a Burisma" (empresa de gas ucraniana donde Hunter Biden, hijo del exvicepresidente estadounidense Joe Biden, formó parte del consejo de la administración) y la supuesta interferencia desde Ucrania en las elecciones presidenciales de 2016 como condición para acceder a mantener una reunión con el líder ucraniano, entonces recién elegido.
Sondland sostuvo que "todos estaban informados" sobre lo que estaba sucediendo, aunque el propio inquilino de la Casa Blanca nunca le habló personalmente a él sobre "ninguna condición previa" para Ucrania: "Todos estaban informados. No era ningún secreto, todos fueron informados por correo electrónico el 19 de julio, días antes de la conversación telefónica presidencial".
Mientras otros testigos declararon que la reactivación de la asistencia militar estadounidense al país europeo también era parte del 'quid pro quo', Sondland señaló que Trump nunca lo dijo expresamente. No obstante, el diplomático señaló que tenía "la impresión de que eso era absolutamente contingente".
"En ausencia de una explicación creíble para la suspensión de la ayuda militar, más tarde llegué a la conclusión de que tanto la ayuda como la visita de Zelenski a la Casa Blanca estaban en peligro. (...) A finales de agosto, mi creencia era que si Ucrania hacía algo para demostrar una intención de luchar contra la corrupción y abordar específicamente el caso de Burisma y las presidenciales del 2016, entonces se levantaría la retención de la ayuda militar", testificó el embajador.
Respuesta de Trump
Donald Trump comentó la comparecencia de Sondland ante los periodistas de la Casa Blanca, donde contó que durante una conversación telefónica que mantuvo en septiembre con el diplomático, este le preguntó directamente sobre sus planes para Ucrania tras enterarse de diferentes "ideas y teorías" sobre la ayuda militar congelada.
"No quiero nada. No quiero nada. No quiero 'quid pro quo'. Dígale [al presidente de Ucrania] que haga lo correcto", afirma Trump que le contestó, unas palabras que concuerdan con lo que testificó Sondland sobre esta misma llamada.
Además, el mandatario aseveró que aunque no conoce muy bien a Sondland, este le parece "un buen tipo". Según el presidente, el testimonio del diplomático lo exonera de culpa: "Diría que eso significa que todo terminó".
La Casa Blanca, por su parte, señaló en un comunicado que Trump "no condicionó ningún aspecto de la relación entre EE.UU. y Ucrania en un 'quid pro quo'". "La evidencia directa escuchada en estas audiencias deja en claro que las acusaciones de los demócratas carecen de fundamento", reza el documento.
"Aunque gran parte del testimonio de hoy del embajador Sondland estaba relacionado con sus presunciones y creencias, más que con hechos concretos, testificó el hecho de que el presidente Trump nunca le dijo que una reunión en la Casa Blanca o la ayuda a Ucrania estuviera vinculada a recibir una declaración pública de presidente Zelenski", agrega el texto, añadiendo que el propio líder ucraniano "ha declarado en repetidas ocasiones que Trump no le presionó de ninguna manera".