Se mantienen las protestas en El Alto mientras se vela a las víctimas de la represión en la planta de Senkata
En Bolivia, mientras la Asamblea Legislativa Nacional (Parlamento) se prepara para analizar dos proyectos de ley enviados por la presidenta autoproclamada, Jeanine Áñez, para convocar nuevas elecciones, anular los comicios del pasado 20 de octubre y elegir nuevos vocales electorales, se mantienen las protestas contra el Gobierno de facto.
Las principales manifestaciones se han vivido en El Alto, bastión de movimientos campesinos e indígenas que apoyan al depuesto presidente Evo Morales. Las protestas se han incrementado luego de un operativo policial y militar en la planta de hidrocarburos de Senkata, que dejó ocho muertos y un desaparecido, según la Defensoría del Pueblo.
"Áñez asesina", se ha podido escuchar en las multitudinarias manifestaciones. Además de protestar, en estas concentraciones se han llevado a cabo ceremonias para velar a algunos de los fallecidos, principalmente en la Plaza 25 de Julio de Senkata.
Hasta ahí llegan luego de hacerles las autopsias, en una morgue improvisada en una iglesia del barrio que se armó tras la represión. En el lugar, varias de las necropsias han confirmado que los fallecimientos se debieron a heridas de bala.
"Nosotros pedimos justicia, ya es tiempo de unirnos y tomar acciones por toda la muerte que está pasando", dijo una mujer, identificada como Enriqueta, mientras esperaba los resultados de la autopsia hecha al cadáver de su hermano.
¿De quién es la responsabilidad?
En el lugar ha estado presente la defensora del Pueblo, Nadie Cruz, quien ha señalado que hubo un uso excesivo de la fuerza por parte de los uniformados.
"Esto tiene que parar. Es una una responsabilidad, además de la policía y las fuerzas armadas, de la comandante en jefe. Y la comandante en jefe es la presidenta", enfatizó.
Mientras, pobladores han mostrado a la prensa los casquillos de balas que han recogido en las calle. "Estas balas son del Ejército, con eso nos han matado", dijo uno de los ciudadanos.
"¿Acaso hemos parido para que nos maten a nosotros?", dijo otra de las mujeres presentes en una de las concentraciones, y luego recalcó: "El Alto se ha levantado, está de pie". Además, instó a Áñez a salir de la Presidencia.
El Gobierno de facto ha eximido de responsabilidad a los militares y policías por los sucedido en Senkata. Luis Fernando López, el ministro de Defensa de Áñez, señaló que "del Ejército no salió un solo proyectil".
Los ocho muertos se Senkata se unen a la larga lista de fallecidos desde que estalló la crisis política en Bolivia, el 20 de octubre de 2019, que ya suma 32 muertos, de los cuales 29 ocurrieron tras la forzada salida de Evo Morales de la Presidencia, el pasado 10 de noviembre, según datos de la Defensoría del Pueblo.