Actualidad
Canciller de facto de Bolivia asegura que hija de Evo Morales retiró su solicitud de asilo en México
La joven se encuentra asilada en la Embajada de México en La Paz, desde el pasado 11 de noviembre.
La canciller de facto de Bolivia, Karen Longaric, afirmó este jueves que la hija de Evo Morales, Evaliz Morales Alvarado, retiró su petición de asilo en México.
"Ella ha renunciado al asilo, es una decisión soberana, propia de ella. Tendrá sus razones", dijo Longaric a medios locales, asegurando que el gobierno de facto de Bolivia "no está ejerciendo persecución sobre ningún político".
Longaric señaló que la legisladora Jeanine Áñez, quien se autoproclamó "presidenta interina" de Bolivia después del golpe de Estado, no pedirá al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador el retiro del asilo político a Evo Morales, aunque criticó que se haya permitido al mandatario depuesto "expresarse y realizar actos políticos que tienden a desestabilizar".
La Cancillería mexicana ya había aclarado que las declaraciones y mensajes que ha ofrecido Morales desde el país no violan los protocolos de asilo y refugio político, como acusó el jueves pasado la autoproclamada presidenta de Bolivia, Jeanine Áñez.
El martes pasado, Áñez escribió en su cuenta de Twitter que le sería otorgado un salvoconducto a Morales Alvarado para que recibiera asilo en México, "bajo el entendimiento de que la familia no es culpable de las acciones de su padre".
Posteriormente, el ministerio boliviano de Exteriores confirmó la decisión a través de la misma red social, precisando que este documento también se concederá a la asambleísta indígena María Inosenta Poñe Poichee.
Tanto Evaliz Morales como Inosenta Poñe están asiladas en la Embajada de México en La Paz desde el pasado 11 de noviembre, tras el golpe de Estado que obligó a Morales a huir de Bolivia.
Hasta el momento, la decisión de desistir del asilo político en México no ha sido confirmada por Evaliz Morales.
A través de su cuenta de Twitter, la hija del mandatario depuesto denunció la "cobarde" represión en La Paz contra los manifestantes que cargaban los féretros de las víctimas de Senkata, en El Alto, que murieron tras el operativo policial y militar del pasado martes. Cuando se dirigían a la Plaza Murillo, tanquetas de la Policía impidieron el paso a las personas y les arrojaron gases lacrimógenos.
Si te ha gustado, ¡compártelo con tus amigos!
comentarios