El senador nacional y tres veces gobernador de la provincia argentina de Tucumán, José Alperovich, fue señalado de presunto abuso sexual por su sobrina segunda, quien presentó una denuncia formal ante Tribunales locales y la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM).
La denunciante, cuya identidad había sido protegida, acompañó su denuncia con una carta pública en la que relató: "No quería que me besara. Lo hacía igual. No quería que me manoseara. Lo hacía igual. No quería que me penetrara. Lo hacía igual".
La joven de 29 años es hija del primo de Alperovich y también trabajó como asistente personal.
Una vez conocida la acusación, el senador escribió en Twitter: "Deseo negar enfáticamente los hechos que denuncia. Cuento con numerosas pruebas y testigos que demuestran mi inocencia y la verdad", aseguró.
Además, el legislador dio a conocer el nombre de la presunta agredida, cuestión que se estaba cuidando, y dijo haber recibido "amenazas y exigencias indebidas" por parte de la denunciante, quién según él, "ahora se presenta falsamente como víctima".
El caso
La denuncia de la mujer indica que los abusos habrían comenzado en diciembre de 2017 y continuaron hasta mayo de 2019. En ese período, ella entró como empleada del Ministerio de Gobierno Justicia y Seguridad de Tucumán, primero a la parte de ceremonial y protocolo.
"Estoy segura que ninguna persona que haya sufrido violencia sexual quisiera estar en este lugar, desnudando la intimidad más dolorosa de su vida", escribió la mujer, quien agregó que lo hacía de esa manera porque era la única forma en que podía ser escuchada.
"Ya no nos callamos más, pero tampoco queremos hablar por lo bajo de lo que nos pasa, de lo que sentimos, de lo que nos hicieron y de cómo hacemos para volver a la vida después de que hechos tan traumáticos nos la cambiaron para siempre", remató.
La presunta víctima de abuso sexual dijo sentirse atrapada y con la sensación de que "nunca nadie" la iba a salvar. "Yo no podía salir sola del encierro porque sabía que tras la primera puerta había caseros, y policías y custodios armados. Todos sabiendo lo que estaba pasando adentro y cuidando las fronteras de él", se lee en la carta.
Según ella, si al 'monstruo' no se le pone nombre y apellido, no existe. "El mío se llama José Jorge Alperovich, mi tío segundo y jefe, por quien fui violentada sexual, física y psicológicamente".
La causa quedó en eel Juzgado 35, a cargo del Juez Rappa. La mujer pidió custodia de la Policía porque teme por su integridad física. Y es que la denuncia es sobre una persona muy poderosa en la provincia y el país.
"Hoy elijo no callarme nunca más. A pesar de que me decía, en pleno horror: 'cállate, ¿no ves como estoy?', para tapar todos mis no. No me callo nunca más. Este es mi nunca más. Ojalá también sea el nunca más de todas aquellas que queremos dejar de callar", concluye la misiva.
Antecedentes
En abril de este año, Alperovich ya había sido noticia. Se viralizó un video en el que él decía en una entrevista televisiva al medio local La Gaceta: "Si quiero cambiar Tucumán, esos dirigentes no pueden trabajar más en el Estado (...) Si no, no voy a cambiar Tucumán. Te lo digo hoy mirando a la cámara: si no, no quiero asumir, me voy a pasear más tiempo, me voy a Miami con mis nietos o la puedo mirar más tranquilo a esta preciosura".
El senador le dijo "preciosura" a la periodista con la que está hablando. Él rió después del comentario, mientras que a ella permaneció seria, evidentemente molesta e incómoda.
Las redes sociales reaccionaron. El comentario del legislador generó una ola de indignación y se instaló el 'hashtag' #AlperovichMachirulo como tendencia. Lo criticaban por machista, misógino y por cosificar a la periodista que tenía enfrente. La organización de Mujeres de Medios de Comunicación de Tucumán repudió el hecho enfáticamente, al igual que el Sindicato de Prensa de Buenos Aires.