Presidenta de facto de Bolivia designa a Salvador Romero como su opción de vocal para el Tribunal Electoral

Romero fue miembro de la Corte Nacional Electoral entre 2004 y 2008, órgano que llegó a presidir.

La presidenta autoproclamada de Bolivia, Jeanine Áñez, designó este lunes a Salvador Romero como vocal del Tribunal Supremo Electoral (TSE) del país suramericano.

Romero fue la opción de la mandataria de facto, debido a que según las leyes locales, uno de los siete miembros del TSE es escogido por el presidente de la nación, mientras que los otros seis son designados por la Asamblea Legislativa Plurinacional, institución que comenzó el proceso para los próximos nombramientos.

Romero, al ser posesionado, criticó a las autoridades electorales anteriores y dijo que "se requiere reencontrar la misión auténtica del Tribunal Electoral, como una institución independiente de los poderes y los partidos" y que garantice "procesos incluyentes, equitativos y honestos".

Salvador Romero es sociólogo, con doctorado en el Instituto de Estudios Políticos de París. Entre los cargos que ha tenido está su participación dentro de la Corte Departamental Electoral de La Paz, en la década de 1990; y, luego, como miembro de la Corte Nacional Electoral entre 2004 y 2008, órgano que llegó a presidir.

Carlos Mesa, el candidato de derecha que perdió en los comicios de octubre, celebró la designación de Romero.

"Un gran acierto de la presidenta Áñez. Sin duda, Salvador Romero es la personalidad más idónea para formar parte de un nuevo TSE imparcial. Su trayectoria, su experiencia y su prestigio latinoamericano, lo avalan", escribió en Twitter.

Del golpe a nuevas elecciones

La conformación de las nuevas autoridades del TSE se da tras la promulgación de la Ley de Régimen Excepcional y Transitorio, por parte de Áñez, que entre otras cosas, exige estos nombramientos para que los vocales se encarguen de la organización, incluyendo la convocatoria, de las próximas elecciones generales.

Todas estas acciones en Bolivia se dan luego que la autoproclamada mandataria anulara los comicios del pasado 20 de octubre, que dieron como ganador al presidente Evo Morales.

Además, estos nombramientos se dan después de la apertura de investigaciones en contra las antiguas autoridades electorales, entre ellas su presidenta María Eugenia Choque Quispe, en medio del golpe de Estado contra Morales.