El asesinato de Abril Cecilia Pérez Sagaón conmocionó a México a finales del pasado mes de noviembre. Durante la noche del lunes 25, cuando se dirigía al Aeropuerto Internacional tras acudir a una audiencia por la custodia de sus hijos, dos sujetos montados en una motocicleta se situaron junto al coche en el que viajaba –acompañada de su abogado y uno de sus hijos– y le dispararon en varias ocasiones. Dos disparos en la cabeza y uno en el cuello segaron su vida a los 46 años de edad. Su hijo resultó herido.
Diez meses antes, Pérez Sagaón había denunciado que su exmarido, Juan Carlos García, quien fuera director de la compañía Amazon en México, había intentado asesinarla. Fue esa reacción, tras varios años de ocultar un supuesto maltrato continuado, la que consiguió que fuera procesado por intento de homicidio.
Al día de hoy, García es el principal sospechoso de orquestar su reciente asesinato.
El caso llegó a provocar la semana pasada, cuatro días después del fallecimiento de Pérez Sagaón, la suspensión de dos jueces, que durante el procesamiento reclasificaron el cargo penal de intento de feminicidio para establecer el de violencia familiar y ordenaron la liberación del agresor el pasado 8 de noviembre, argumentando que García no merecía la prisión preventiva, a pesar de que había golpeado a la víctima con un bate de beisbol en la cabeza mientras esta se hallaba dormida.
"Sólo un cobarde le hace esto a una mujer"
El domingo pasado, el hermano de la fallecida, Javier Pérez Sagaón, publicó en Twitter unas explícitas fotografías que muestran las heridas provocadas por los ataques del exesposo y presunto asesino.
Advertencia: las imágenes que se muestran a continuación pueden herir la sensibilidad del lector.
"Solo un cobarde le hace esto a una mujer", puede leerse en el tuit de Javier Pérez, en el que pide "justicia" para su hermana.
En México se asesina a una decena de mujeres al día y al menos ocho de cada diez casos permanecen impunes, según datos de la organización civil Impunidad Cero.