El Senado mexicano ratificó este jueves el protocolo modificatorio del tratado comercial entre México, EE.UU. y Canadá (T-MEC), aprobado el pasado martes por los tres países.
Con 107 votos a favor y 1 en contra, el Pleno de la cámara alta aprobó el acuerdo modificatorio, junto con dos acuerdos en materia de cooperación ambiental y verificación aduanera celebrados entre EE.UU. y México.
El dictamen fue aprobado por el Pleno del Senado tras la discusión en las Comisiones Unidas de Relaciones Exteriores, de Puntos Constitucionales, de Economía y de Trabajo y Previsión Social.
Para el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, Héctor Vasconcelos, del partido oficialista Morena, la ratificación del T-MEC garantiza "certidumbre para el comercio y la inversión" en la economía mexicana.
"Nosotros cumplimos"
Desde un avión comercial en el aeropuerto de Hermosillo, Sonora, el presidente Andrés Manuel López Obrador tildó la ratificación por parte del Senado mexicano como una "muy buena noticia".
"Ya nosotros cumplimos, lo firmó el Ejecutivo, lo ratificó el Senado de México y ahora corresponde hacer lo mismo al Congreso estadounidense y [al Parlamento] de Canadá", señaló el mandatario en un video.
Por su parte, Jesús Seade, negociador comercial por parte del Gobierno mexicano para América del Norte, felicitó al Senado y al Ejecutivo por su liderazgo en la aprobación y ratificación del nuevo T-MEC.
El también subsecretario destacó que el nuevo acuerdo comercial crea paneles laborales efectivos para resolver controversias con base en derecho y elimina la protección alta a medicamentos biomédicos, beneficiando a los genéricos.
Largo camino
El martes pasado, tras más de un año de negociaciones, los Gobiernos de México, EE.UU. y Canadá firmaron la nueva versión del T-MEC, durante un encuentro de funcionarios de los tres países en Palacio Nacional de Ciudad de México.
El anuncio sobre la ratificación del T-MEC se produjo horas después de que la Cámara de Representantes de EE.UU., dominada por el Partido Demócrata, diera luz verde a la aprobación del tratado con las nuevas modificaciones, tras permanecer en la congeladora durante un año.
Aunque México aceleró el paso para la ratificación del nuevo acuerdo comercial, la agenda política en EE.UU. y Canadá podría alargar el inicio del T-MEC hasta los primeros meses del próximo año.
Entre los cambios al acuerdo firmado en noviembre de 2018, se encuentran los avances en términos de protección intelectual, reglas de origen de los insumos del sector automotriz y la libre circulación de medicamentos, así como medidas más restrictivas para la protección ambiental y resolución de controversias.
En uno de los puntos más polémicos, el acuerdo establecía la supervisión laboral directa de autoridades estadounidenses en empresas mexicanas, aunque finalmente fue rechazado.
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