Los senadores demócratas han propuesto iniciar un proceso de una semana respecto al juicio político contra Donald Trump, en la que quieren escuchar los testimonios de cuatro nuevos testigos sobre el actuar del presidente de Estados Unidos hacia Ucrania.
Entre ellos se encuentra el exasesor de Seguridad Nacional de EE.UU., John Bolton, y el jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Mick Mulvaney. Bolton abandonó la Casa Blanca en septiembre de este año y posteriormente comentó, según reportes de los medios, que no quería formar parte del "trato de drogas" que supuestamente tuvo por objetivo presionar al Gobierno ucraniano para que lanzara una investigación contra el rival político de Trump, el demóctata Joe Biden.
Mulvaney, por su parte, ha reconocido que la ayuda militar de EE.UU. para Ucrania estaba siendo retenida. Otros dos testigos que quieren escuchar los demócratas son Robert Blair, un importante asesor de Mulvaney, y Michael Duffey, funcionario responsable del presupuesto que estaba encargado de manejar el asunto de Ucrania.
Trump afronta dos cargos en relación con este caso: abuso del poder y obstrucción del Congreso, así como el 'impeachment' en la Cámara de Representantes, dominada por demócratas, aunque se prevé que quede absuelto en el juicio político en el Senado, de mayoría republicana.
Proceso de 'impeachment' contra Trump
El pasado 24 de septiembre, Pelosi anunció el inicio de una investigación de juicio político que tiene como fin destituir a Trump bajo la sospecha de que habría presionado en una conversación telefónica a su homólogo ucraniano, Vladímir Zelenski, para que investigara a su rival político, Joe Biden, a quien podría acabar enfrentándose en las presidenciales de 2020.
En la queja formal presentada semanas después de la conversación de Trump con su homólogo ucraniano se afirma que el presidente de EE.UU. utilizó su poder para "solicitar interferencia de un país extranjero en las elecciones estadounidenses del 2020", presionando a otro país para que investigue a uno de sus principales rivales políticos.
Ambos mandatarios negaron las acusaciones, mientras que la Administración Trump reaccionó enviando a Pelosi y otros legisladores demócratas una carta en la que se calificaba al proceso de 'impeachment' iniciado como contrario a la Constitución.