El personal de un restaurante McDonald's en la ciudad estadounidense de Lodi, California, ha evitado que una mujer fuera víctima de violencia doméstica, informa la prensa local.
El 24 de diciembre una pareja había ingresado al restaurante de comida rápida, donde la mujer pidió disimuladamente a los trabajadores que llamaran al número de emergencias 911 y se fue al baño. Después ella se dirigió al mostrador para hacer un pedido, pero su acompañante se lo impidió, obligándola a usar el autoservicio.
Cuando llegó el turno para hacer el pedido a través del autoservicio, la mujer articuló la palabra 'ayúdenme' a la persona que se encontraba en la ventanilla. Tras eso, el personal del local reaccionó llamando al 911, y demorando la entrega de los pedidos para que los coches avanzaran lentamente mientras llegara la Policía.
En el coche en el que viajaba la pareja, los policías encontraron un revolver robado con municiones. La mujer indicó a los oficiales que en el pasado había sufrido violencia doméstica por parte de su pareja, y que ese día la había amenazado con dispararle. El hombre, identificado como Eduardo Valenzuela (de 35 años), tenía antecedentes penales y fue encarcelado bajo sospecha de realizar amenazas criminales, posesión de propiedad robada y por ser un delincuente con tenencia de arma de fuego.