Un miembro del servicio militar estadounidense y dos contratistas del Departamento de Defensa murieron este 5 de enero durante un ataque a una base militar en Kenia por parte de milicianos del grupo islamista somalí Al Shabaab.
El Ejército norteamericano confirmó en un comunicado las bajas, agregando que dos miembros del Departamento de Defensa de su país habían resultado heridos. Ambos uniformados se encuentran "en condición estable y están siendo evacuados", señaló el mando responsable de las operaciones militares de EE.UU. en África.
El ataque tuvo lugar en la mañana de este domingo en la base aérea de Manda Bay, en el condado de Lamu, en la región costera de Kenia. De acuerdo con el documento, los combatientes penetraron el perímetro inicial de la instalación militar, fuertemente fortificada, y abrieron fuego usando armas pequeñas. El personal estadounidense logró repeler la incursión, que resultó en la destrucción de equipamiento de defensa de EE.UU., incluidos seis aviones operados por contratistas.
Por su parte el Ejército de Kenia indicó que intento de traspaso fue repelido con éxito y al menos cuatro atacantes fueron asesinados. Dos días antes, las Fuerzas Armadas estadounidenses realizaron un ataque aéreo contra Al Shabaab que acabó con un saldo de tres islamistas muertos.
El aeródromo de Manda Bay es utilizado para misiones de capacitación de los socios africanos de EE.UU., y, según sus miembros, busca "responder a las crisis y proteger los intereses de Washington en esta área estratégicamente importante".