La Defensoría del Pueblo de Colombia emitió una alerta sobre la difícil situación de orden público que vive el municipio Nuquí, ubicado en el departamento de Chocó, al noroeste del país.
El defensor colombiano, Carlos Alfonso Negret, precisó que en las últimas horas fue asesinado por hombres armados el guardia indígena Anuar Rojas Isaramá, lo que provocó el desplazamiento forzado de al menos 80 integrantes de la comunidad originaria Embera Jagua.
Según la entidad, Anuar Rojas Isaramá fue asesinado en Agua Blanca, un sector de Nuquí muy frecuentado por turistas tanto nacionales como extranjeros debido a la belleza de sus playas.
De acuerdo a la Defensoría, los desplazados se dirigen a la cabecera municipal de Nuquí, una zona que se encuentra en disputa entre miembros del Ejército de Liberación Nacional (Eln), las Autodefesas Gaitanistas de Colombia (AGC) y bandas criminales, lo que representa un peligro para esta población.
Por ese motivo, la institución le pidió al Gobierno colombiano que se activen de manera urgente las rutas institucionales de atención.
Días atrás, el defensor del Pueblo en Chocó, Luis Murillo, advirtió que unas 6.000 personas están confinadas y 7.000 han resultado desplazadas por la violencia en ese departamento.
Murillo indicó que "es muy grave la afectación a los derechos de las poblaciones afrodescendientes e indígenas de la zona, en el marco de reposicionamiento del ELN y las AGC, que están en plena guerra en los territorios ancestrales".