El Gobierno británico financió en secreto a Reuters en 1960 y 1970 a pedido de una unidad de propaganda antisoviética
El Gobierno de Reino Unido financió secretamente a la agencia de noticias Reuters en la década de 1960 y 1970, a pedido de una unidad de propaganda antisoviética relacionada con la Inteligencia británica, informó la propia agencia de comunicación tras la desclasificación de algunos documentos de la época.
En esta acción, según los documentos, también estuvo involucrada la BBC, puesto que Londres ocultó los fondos mediante un incremento de pagos de suscripción de noticias por parte de la corporación británica a Reuters.
"Ahora estamos en condiciones de concluir un acuerdo que brinde apoyo discreto del Gobierno para los servicios de Reuters en Medio Oriente y América Latina", dice uno de los textos citado por la agencia internacional de noticias, que data de 1969 y que fue tachado de "secreto". Por ello, el medio señala que los fondos fueron destinados para ampliar la cobertura en esas regiones.
El documento que citan lleva el título de 'Financiación de Reuters por HMG', siglas que se refieren a 'Her Majesty’s Government' o, en español, el Gobierno de su Majestad.
Además, los materiales muestran que el Departamento de Investigación de Información (IRD, por las siglas en inglés), una unidad de propaganda antisoviética con lazos cercanos a la Inteligencia británica, lideró las negociaciones con Reuters.
Los fondos entregados a la agencia por parte de HMG fueron de 245.000 libras esterlinas (317.838 dólares al tipo de cambio actual) anuales, hasta 1968; luego se redujo a unas 100.000 libras al año en 1969-1970.
¿Hubo influencia antisoviética por parte de Londres?
Reuters pone en duda el grado de influencia que el Gobierno británico pudo ejercer sobre las noticias de este medio. No obstante, señala que el acuerdo se hizo justo cuando la agencia necesitaba dinero y Londres, junto a otras potencias occidentales, buscaba impulsar su influencia en contra de la Unión Soviética.
Lo que sí aclara es que estos documentos desclasificados "ilustran el nivel de participación que el Gobierno tuvo alguna vez en los asuntos de Reuters y el acuerdo explícito para ocultar el financiamiento".
David Crundwell, portavoz de Reuters, dijo que ese tipo de acuerdo no lo firmarían en la actualidad, puesto que no se ajusta a los principios éticos de la agencia de noticias.
"Aunque Reuters vende noticias a un amplio rango de clientes, incluidos gobiernos, ningún gobierno ejerce control sobre cómo o qué produce Reuters", aclaró Crundwell.