Senadores de EE.UU. planean gastar 1.250 millones de dólares para acabar con la dominación de China en la tecnología 5G
Seis senadores del Congreso de EE.UU. introdujeron este martes una ley que prevé invertir al menos 1.250 millones de dólares en el desarrollo de la tecnología 5G estadounidense.
El proyecto propone crear dos fondos que existirán durante diez años. El primero recibirá no menos de 750 millones de dólares que se destinarán a las compañías nacionales para que desarrollen las redes 5G, aunque el tamaño máximo de una subvención no superará los 20 millones de dólares.
El segundo, de 500 millones de dólares, financiará a empresas extranjeras que creen "tecnologías de telecomunicaciones seguras y confiables". En este caso, la condición necesaria es un acuerdo entre el secretario de Estado de EE.UU. y el Gobierno del país receptor y el compromiso de las autoridades locales de participar en la inversión.
Aunque el borrador no menciona a países o compañías concretos, un comunicado del Comité de Relaciones Extranjeras del Congreso deja claro que la medida está dirigida contra China y, más específicamente, contra Huawei y ZTE.
"Con estrechos vínculos con el Partido Comunista de China, las compañías tecnológicas chinas dirigidas por el Estado presentan riesgos inaceptables para nuestra seguridad nacional y para la integridad de las redes de información a nivel mundial", afirman los legisladores, que aseveran que las inversiones permitirán "que proveedores alternativos ingresen al mercado para componentes de red específicos".
"Estamos en un punto crítico de la historia para definir el futuro de la relación entre EE.UU. y China en el siglo XXI, y no podemos permitir que las compañías de telecomunicaciones dirigidas por el Estado de China superen a los competidores estadounidenses", cita el comunicado al senador Marco Rubio, uno de los promotores de la ley.
Enfrentamiento de Huawei con Washington
El gigante chino de las telecomunicaciones se encuentra inmerso en un enfrentamiento con Washington, que lo acusa de espiar para el Gobierno del país asiático a través de sus dispositivos, algo que la compañía desmiente.
En mayo, el presidente de EE.UU., Donald Trump, firmó una orden ejecutiva que prohíbe el uso de equipos de telecomunicaciones fabricados por compañías consideradas como una amenaza para la seguridad nacional de EE.UU. Asimismo, el Departamento de Comercio de EE.UU. incluyó en su 'lista negra' a Huawei.
Mientras tanto, el Gobierno de EE.UU. también ha presionado a sus aliados en Europa para que cierren las puertas de sus redes nacionales 5G a las compañías chinas. Sin embargo, los operadores de ciertos países europeos, como España, Reino Unido, Italia y Suiza, ya han expresado abiertamente su interés en la tecnología del gigante chino.