Un recluso de 64 años, y con antecedentes de violencia contra las mujeres, fue ejecutado este miércoles en EE.UU. por asesinar a su esposa en enero del 2005. John Gardner recibió una inyección letal en la prisión estatal de Huntsville, Texas.
Cuando le preguntaron por su declaración final el hombre se disculpó con el hijo, la hija y la madre de su esposa, que acudieron a presenciar su ejecución, informa AP.
"Me gustaría pedir perdón por su dolor. Espero que lo que haga hoy les dé paz, alegría, lo que sea necesario para perdonar. Lo siento. Sé que no pueden perdonarme, pero espero que algún día lo hagan", dijo Gardner.
El crimen
En diciembre del 2004, la esposa del asesino, Tammy Gardner, solicitó el divorcio e incluso marcó en su calendario la fecha: 7 de febrero de 2005. Según uno de los testimonios, la mujer se acercaba al calendario y decía: "Ya casi estás allí. Ya casi estás". Pero cuando faltaban solo 15 días para la fecha, el 23 de enero, John Gardner irrumpió en su casa y le disparó en la cabeza.
A pesar de las heridas Tammy Gardner logró llamar al 911 e informar que su esposo le había disparado y que se había ido en una camioneta. La mujer falleció en el hospital dos días después. La víctima había confesado anteriormente que temía que nunca saldría con vida del matrimonio.
Sus amigos y familiares declararon que la mujer vivía con el miedo constante de su esposo, quien la golpeaba, estrangulaba y amenazaba con un arma. Los fiscales describieron el matrimonio entre John y Tammy como breve, pero violento. La pareja se casó en 1999 y Tammy era la quinta esposa de Gardner.
"Era un abusador clásico", dijo Curtis Howard, uno de los fiscales de la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Collin.
El juicio
Sus abogados presentaron una apelación a la Corte Suprema de los EE.UU., alegando que anteriormente no se habían presentado evidencias de que Gardner sufría de "ira de abandono", una condición, que según el condenado, hace que los hombres maten a sus parejas con fuerza excesiva cuando se enfrentan al abandono reciente o inminente. La apelación fue rechazada este lunes.
Según Howard, la teoría del abandono no tenía sentido, ya que no estaba relacionada con todos sus actos de violencia, que incluyeron el asesinato de su segunda esposa, que estaba embarazada en ese momento, el secuestro de su tercera esposa a punta de cuchillo y violencia física contra la hija de la última.
Gardner se convirtió en el primer preso ejecutado este año en EE.UU.