Desde el inicio de las protestas antigubernamentales en Chile, un juego que proponen los manifestantes en las calles a los automovilistas se ha popularizado tanto que ha despertado simpatía y críticas a la vez.
Se trata de 'El que baila, pasa', un reto que apunta a que el conductor que desea atravesar el corte de una vía por las protestas, se baje de su auto y baile, para luego seguir su camino.
En internet, se han viralizado cientos de videos que muestran cómo muchos de ellos aceptan el intercambio y, mal o bien, ensayan algún paso, mientras quienes bloquean la calle celebran y abren paso al automovilista. Otros, sin embargo, reaccionan oponiéndose y en muchos casos se han dado situaciones de violencia.
Desde este jueves, con la entrada en vigencia de la Ley Antisaqueos (N° 21.208), esta práctica será castigada con la pena de presidio menor en su grado mínimo, desde 61 a 540 días de cárcel. Esto se debe a que la normativa modifica el Código Penal, y pasa a "tipificar acciones que atenten contra la libertad de circulación de las personas en la vía pública a través de medios violentos e intimidatorios".
En noviembre del año pasado, la vocera del Gobierno, Karla Rubilar, cuestionó esta práctica por considerarla "humillante y violenta".
"Cuando una manifestación pacífica se toma la calle y obliga a los conductores a bajarse y bailar para poder seguir avanzando, deja de ser pacífica", opinó.
En el mismo sentido se expresó el diputado oficialista Javier Macaya, quien dijo que se trataba de una "práctica fascista", y utilizó el ejemplo de una escena de la película El pianista, donde un grupo de judíos son obligados a bailar por soldados nazis.
Lo cierto es que la ley, aprobada el 14 de enero y publicada este jueves en el Diario Oficial, endurece las penas para actos como saqueos, barricadas en la vía pública y, también, "el que baila, pasa".