El Ministerio de Exteriores de Pakistán ha acusado a la India de romper el alto del fuego en la línea de control en Cachemira, según un comunicado de la Cancillería divulgado este lunes, informa la agencia PTI.
El documento indica que el jefe del departamento para Asia meridional del ministerio, Zahid Hafeez Chaudhri, citó al encargado de negocios de la Embajada india en Islamabad, Gaurav Ahluwalia, y "condenó la violación no provocada del régimen de cese al fuego por las fuerza indias a lo largo de la línea de control".
De acuerdo con el comunicado, 10 personas resultaron heridas en el ataque, incluidas mujeres y niños.
Separadamente, el Ejército pakistaní comunicó que había respondido con fuego, matando a un soldado indio, dejando tres heridos y causando daños considerables a diversos puestos de control indios.
La Cancillería pakistaní acusó a Nueva Delhi de violar el armisticio de 2003, desacatar los derechos humanos y amenazar la paz y estabilidad en la región.
Las relaciones entre la India y Pakistán se deterioraron en agosto pasado cuando Nueva Delhi revocó el estatus de autonomía del que el estado de Jammu y Cachemira gozaba desde hace décadas, defendiendo la medida como una necesidad para eliminar el terrorismo y alentar la economía en la zona. Asimismo, la India declaró el toque de queda en algunas partes de la región con el fin de mantener la ley y el orden e impedir la violencia.
Pakistán condenó estas medidas, se negó a reconocer la situación como asunto interno de la India y expulsó al embajador indio en Islamabad.
Un territorio en disputa desde 1947
La región de Cachemira es reclamada en su totalidad tanto por la India como por Pakistán, y en la actualidad permanece dividida entre estas dos potencias nucleares. La parte india ―Jammu y Cachemira― comprende tres regiones: Jammu, de mayoría hindú, Cachemira, de mayoría musulmana, y Ladakh, también de mayoría musulmana, pero con un alto número de budistas.
La disputa territorial se remonta a la descolonización británica de 1947, y desde aquel entonces ha sido causa de dos guerras entre ambas naciones. Nueva Delhi e Islamabad suelen culparse mutuamente de agresiones en la frontera, mientras los residentes de los pueblos vecinos se ven obligados a vivir en medio de intercambios de disparos.