En los últimos años, Moscú ha transformado su imagen de tal manera que se ha convertido en la encarnación de una 'revolución de creatividad' y tanto los residentes locales como los visitantes pueden notar en persona ese cambio radical.
En 2019, la ciudad se convirtió en la mejor de Rusia en cuanto a la calidad del ambiente metropolitano en función del urbanismo, el estado del transporte público, la seguridad de las carreteras y la calidad de los espacios públicos, entre otros factores.
El replanteamiento total sobre cómo debería ser esta ciudad para responder a las necesidades y mejorar la calidad de vida también es mérito de sus residentes: el año pasado, más de 200.000 personas participaron en las votaciones que la Alcaldía impulsó mediante las iniciativas 'Mi barrio' y 'Ciudadano activo' para decidir dónde hacían falta nuevos bancos, farolas, aparcamientos para bicicletas, parques infantiles y otros objetos urbanos que sumaron cerca de 75.000.
En el marco del programa 'Mi barrio' el año pasado se renovaron más de 200 espacios públicos de Moscú y se restauraron instalaciones de más de 380 colegios y jardines infantiles, además de renovar más de 250 zonas para el practicar deporte al aire libre y crear nuevas canchas de fútbol, vóleibol, baloncesto, hockey y rugby, así como modernos parques de 'skate' y 'pump tracks', pistas bacheadas para los aficionados de hacer cabriolas con su bicicleta.
Además, uno de los objetivos más importantes para este programa es la creación de condiciones para el desarrollo de la vida cultural en cada barrio moscovita. En 2019 se han creado y restaurado 216 elementos culturales como teatros, museos, escuelas de arte, de música y bibliotecas.
Asimismo, la consultora Resonance Consultancy otorgó a Moscú el sexto puesto en su clasificación con las 10 mejores ciudades del mundo, una lista en la que se encuentran urbes como Londres, París, Nueva York, Tokio, Barcelona, Chicago, Singapur, Dubái y San Francisco.
Moscú goza de este prestigio gracias a sus joyas arquitectónicas, su variada vida cultural y sus diversos lugares para comer o realizar actividades, como los acogedores 'anticafés', donde los clientes pagan poco dinero por minuto a cambio de un espacio con barra libre de té o café con galletas y otros dulces y se puede trabajar, quedar con amigos, participar en alguna clase o disfrutar de cualquier otro evento.
En 2019, las autoridades de Moscú mejoraron unas 950 hectáreas de 159 parques y crearon modernas zonas recreativas para niños y adultos. En varios parques y zonas verdes se instalaron más de 300 áreas de recreo para niños. El nivel de equipamiento de estas zonas también cambió cualitativamente. En su construcción se ha optado por usar elementos naturales como agua, madera, arena y piedras para el diseño de los espacios creados para los más pequeños.
Asimismo, la reconstrucción del icónico Centro Panruso de Exposiciones (VDNJ, por sus siglas en ruso), un espacio con alrededor de 235 hectáreas que se ideó para representar los logros económicos, científicos y tecnológicos de distintas repúblicas de la URSS en diferentes pabellones, convirtió el lugar en mucho más que un conjunto de obras del monumentalismo socialista, ya que es sede de la pista de patinaje más grande del mundo en invierno, posee museos para todos los gustos y hasta acoge conciertos.
Otro de los numerosos sitios donde los moscovitas escapan del ajetreo diario y que luce ahora un aspecto distinto es el parque Luzhnikí, situado en el barrio céntrico de Jamóvniki al lado del complejo deportivo del mismo nombre, cuyo estadio acogió partidos de fútbol en el Mundial 2018.
"El año pasado fue una etapa importante para el programa 'Mi barrio' porque los moscovitas pudieron ver sus resultados reales y los cambios en todos los distritos de la capital. Colaboramos estrechamente con los ciudadanos y tenemos en cuenta sus opiniones para la modernización de la infraestructura de recreo y desarrollo del espacio urbano. Más de 200.000 personas participaron en las votaciones mediante el programa 'Mi barrio' en el portal 'Ciudadano activo'", señaló Dmitri Presnov, subjefe de Gobierno de Moscú. "En 2020 continuaremos la práctica de la realimentación y recurriremos más a los ciudadanos de Moscú en la realización de todas las etapas del programa", añadió.
El Urban Land Institute (ULI) también destaca la imagen que Moscú ofrece hoy en día gracias a su centro histórico pensado para los peatones, el estrechamiento de sus grandes carreteras y avenidas y la renovación de sus plazoletas antes descuidadas, que son un verdadero imán para los transeúntes.
De hecho, la capital de Rusia resultó premiada por la excelencia a la hora de renovar sus calles, un programa para crear un entorno urbano confortable en el que participaron diseñadores de las firmas Strelka KB, Djao-Rakitine, Snøhetta, West 8, Topotek 1, Martha Schwartz Partners, OKRA y Karres + Brands.