Este 25 de febrero, la NASA probó con éxito el motor de control de actitud (ACM, por sus siglas en inglés), parte crucial del sistema de aborto de lanzamiento de la nave espacial la Orion, destinado a ayudar a llevar a la tripulación a un lugar seguro en caso de emergencia en las futuras misiones a la Luna.
El test de fuego caliente, que duró 30 segundos, fue la tercera y última prueba para cualificar al motor para misiones humanas, empezando por la Artemis II, publicó la NASA en un comunicado.
"¡Grandes noticias! El sistema de aborto de lanzamiento de la Orion pasó hoy su prueba final de fuego caliente. La seguridad de nuestros astronautas es nuestra primera prioridad y este motor abortado expulsar a la tripulación en caso de emergencia", tuiteó el administrador de la NASA, Jim Bridenstine.
El año pasado, la NASA probó con éxito el sistema que permite abortar el lanzamiento de la Orion, con lo que exhibe su capacidad a la hora de garantizar la seguridad de los astronautas en caso de emergencia.
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