El representante especial para la Reconciliación de Afganistán, Zalmay Khalilzad, y el cofundador del movimiento radical Talibán, mulá Abdul Ghani Baradar, han firmado este 29 de febrero un acuerdo sobre la retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán y el inicio del proceso de paz en este país asiático. La ceremonia se ha celebrado en la capital de Catar, Doha.
Este tratado es resultado de las negociaciones que de Khalilzad ha mantenido con los talibanes desde octubre del 2018.
En este contexto el presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, ha expresado la esperanza de que este tratado conduzca a un alto el fuego permanente, la paz y la estabilidad en su país.
Puntos clave del acuerdo
El documento prevé que EE.UU. reduzca sus tropas en Afganistán hasta 8.600 efectivos en un período de 135 días tras la suscripción, mientras que la salida completa de todas las fuerzas de la OTAN debe concluirse en 14 meses.
Además, se deben crear las condiciones para llegar a un acuerdo político y lograr un alto el fuego permanente y sostenible entre el Gobierno de Afganistán y representantes talibanes, fomentar la confianza entre las partes y liberar un número significativo de prisioneros en ambos lados.
La República Islámica del Afganistán, por su parte, se compromete a iniciar un compromiso diplomático con los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU para eliminar a los miembros del Talibán de la lista de sanciones antes del 29 de mayo de 2020.
Cabe mencionar, que el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha advertido que en caso de que "las condiciones en el terreno se deterioren" y los talibanes no cumplan con el acuerdo, EE.UU. puede aumentar otra vez su presencia militar en el país.
Anteriormente este viernes, el presidente de EE.UU., Donald Trump, comunicó que "pronto, bajo mi dirección, el secretario de Estado, Mike Pompeo, será testigo de la firma de un acuerdo con representantes de los talibanes, mientras que el secretario de Defensa, Mark Esper, emitirá una declaración conjunta con el Gobierno de Afganistán".
"Si los talibanes y el Gobierno de Afganistán cumplen con estos compromisos, tendremos un camino poderoso para poner fin a la guerra en Afganistán y llevar a nuestras tropas a casa", indicó el presidente.
En opinión del analista internacional Rolando Dromundo, EE.UU. cerró dicho acuerdo porque no tenía otra opción, después de 18 años de fracaso de su política en Afganistán de querer imponer un Estado títere que fuera manejable en los términos que Washington pretendiera.