Rusia traza las líneas de su política en el Ártico hasta 2035
Moscú ya cuenta con un destacamento militar convencional y un sistema de seguridad costera en el Ártico para garantizar su soberanía y preservar la paz y la estabilidad en la región, como indica el decreto que el presidente de Rusia, Vladímir Putin, firmó el pasado 5 de marzo con vistas a establecer la política estatal rusa en la zona hasta 2035.
El objetivo principal de este refuerzo será impedir el uso potencial de fuerza militar contra ese territorio ruso y en este plan para los próximos 15 años Rusia prevé aumentar las capacidades de sus fuerzas militares en el Ártico, así como modernizar las infraestructuras y mejorar los sistemas de vigilancia aérea, marítima y submarina.
El Gobierno ruso también intentará mejorar la calidad del medio y proteger el estilo de vida de las comunidades indígenas que habitan esa región, fomentar la cooperación internacional en la zona e impulsar el desarrollo de la Ruta Marítima del Norte para consolidar las posiciones de Rusia en el ámbito de las comunicaciones marítimas.
Finalmente, Moscú también se enfocará en el uso racional de los recursos estratégicos del Ártico para impulsar el crecimiento económico de Rusia, que en los últimos años ha aumentado sus inversiones para explorar y desarrollar la zona al mismo tiempo que países como EE.UU., Canadá, Dinamarca y Noruega buscan maneras para establecer su presencia en una región rica en recursos naturales que resulta estratégica desde el punto de vista geográfico.
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