El ministro de Salud de Francia, Olivier Véran, ha anunciado este domingo que en su país se prohibirán las reuniones con más de 1.000 personas para impedir la propagación del nuevo coronavirus.
Las autoridades francesas han tomado esta decisión durante una reunión de más de dos horas que el Consejo de Defensa ha celebrado en el Palacio del Elíseo de París.