En Estados Unidos, alrededor de 500.000 personas recluidas por no poder pagar la fianza están expuestas a un alto riesgo de contraer coronavirus mientras esperan su juicio, de acuerdo con Huffpost.
Las condiciones en las instituciones carcelarias son muy propicias para que se extienda a gran velocidad el virus. Esto se debe a que los prisioneros viven muy cerca los unos de los otros en las celdas, y las condiciones higiénicas no son las más adecuadas.
Incluso, según la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés), una organización civil de asesoría y defensa legal, a los internos a menudo se les niega el jabón y los suministros de limpieza adecuados, haciendo que el control de las infecciones sea casi imposible.
Paradójicamente, a pesar de que presos del estado de Nueva York producen desinfectante para manos, ganando 65 centavos de dólar la hora, el uso de este está prohibido en el interior de las cárceles debido a que su componente principal es el alcohol.
El riesgo de infecciones dentro de las prisiones es conocido por autoridades penitenciarias de otros países. Un ejemplo de ello son las autoridades iraníes, quienes liberarontemporalmente a 70.000 personas en un intento de contener la propagación del covid-19.
La vulnerabilidad en que se encuentran los reclusos en cuanto a la contracción de infecciones ha llevado a varias organizaciones civiles y de derechos humanos en EE.UU. a exigir la libertad de todos aquellos que esperan juicio bajo custodia por no poder pagar su fianza.
Por su parte, Scott Hechinger, un abogado de los Servicios de Defensa de Brooklyn, dijo en una entrevista a Huffpost que "ya es inaceptable que la gente esté encerrada porque no puede permitirse comprar su libertad", y "además, ahora están expuestos a [… ] contraer un virus mortal".
De acuerdo al último reporte oficial de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU., de momento se registran un total de 1.629 casos de coronavirus y 41 decesos a causa del covid-19 en el país norteamericano.