El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha violado su cuarentena y ha salido a las calles de la capital sin mascarilla para acompañar a sus seguidores en una protesta contra el Congreso y el Tribunal Supremo Federal, que se celebró este 15 de marzo en frente del Palacio de Planalto.
Su reciente retorno de Estados Unidos y la detección del coronavirus en varios de los funcionarios que lo acompañaron en la gira, no detuvieron al mandatario, que salió a hacerse fotos con sus simpatizantes.
De este modo, Bolsonaro desafió el pedido de su propio gobierno de aislamiento por siete días a todas las personas que regresen del extranjero y la suspensión de eventos masivos, aunque él mismo dio negativo por coronavirus.
Según la última actualización del Ministerio de Salud brasileño, en el país se han confirmado 176 casos de infección con el covid-19, mientras que 1.470 casos fueron descartados.