Selva, una pequeña localidad del norte argentino, se ha convertido en la primera ciudad de ese país en ser aislada totalmente tras un posible contagio de coronavirus originado luego de una supuesta infidelidad.
Según relata El Liberal, la historia habría comenzado cuando un joven de 27 años, nacido en Selva (Santiago del Estero), mantuvo un encuentro íntimo con una mujer casada y presuntamente infectada que lo invitó a encontrarse en la ciudad de Córdoba, a unas cinco horas.
Durante la cita, la joven le contó al muchacho que había llegado días atrás de España y que había dado positivo en una prueba de coronavirus mientras estuvo en el país europeo.
El regreso
Al volver a su poblado, de apenas 2.500 habitantes, más de una decena de personas le hizo un asado de bienvenida al chico y en la reunión les contó lo que le había afirmado la mujer.
Ante la alarma y la posibilidad de ser contagiado, uno de los presentes le comunicó la información a su familia y posteriormente a la Policía de Selva, que contactó al Gobierno de Córdoba para que se internara a la mujer que sostuvo el encuentro con el joven y a su esposo.
Tras conocerse la noticia, toda la ciudad quedó en cuarentena y se le realizaron las pruebas al muchacho para determinar si está contagiado o no.