A partir de este lunes, 30 de marzo, hasta la finalización del estado de alarma decretado el pasado 14 de marzo, para contener la pandemia del coronavirus que azota a España, el Gobierno ha prohibido la celebración de todos los velatorios y funerales, independientemente de la causa de la muerte. Además, en el enterramiento o cremación del finado sólo podrán estar presentes tres allegados.
Hasta ahora, no había restricciones en todo el territorio nacional, sino que eran las consejerías de Sanidad de cada Comunidad Autónoma quienes habían determinado en algunos casos restricciones para garantizar que se cumplían las medidas de seguridad impuestas por las autoridades sanitarias, como el respeto de la distancia mínima entre personas y evitar aglomeraciones.
La nueva normativa obliga a posponer la celebración de cultos religiosos o ceremonias civiles fúnebres hasta que finalice el estado de alarma, aunque era una medida que habían empezado a llevar a la práctica ya diversas empresas funerarias.
Precios abusivos de funerarias
Asimismo, en el mismo decreto el Gobierno prohibe el incremento de los precios de los servicios funerarios. Así, durante este periodo, estas empresas no podrán incrementar los precios por encima de los vigentes antes del 14 de marzo de 2020, cuando se declaró el estado de alarma. Además, la compañía estará obligada a entregar un presupuesto en el que desglose cada uno de los conceptos incluidos y la lista de precios vigente.
Esta medida llega después de que la plataforma Afectados Mémora denunciara abusos en este sector. En concreto, difundieron el caso de una empresa en Manresa (Barcelona) que intentó cobrar 1.525 euros por un ataúd especial, "envasado al vacío", específico para víctimas de coronavirus. Tras la denuncia pública del nieto del fallecido, la empresa rebajó 1.000 euros la factura. En este caso, el presupuesto añadía 40 euros por acondicionamiento del cadáver, 609 por personal y prestación del servicio, 235 por los traslados, 471 en concepto de cementerio o incineración y 418 por el velatorio y la ceremonia, a lo que hay que añadir el 21 % de IVA.
Focos en entierros
Lo cierto es que en España se han detectado varios focos en entierros o ceremonias similares. El más importante de ellos tuvo lugar en la localidad de Haro, en la pequeña Comunidad Autónoma de La Rioja, donde decenas de personas se contagiaron de coronavirus al acudir a un entierro y convirtieron al municipio, de tan solo 11.000 habitantes, en uno de los principales focos de la epidemia en el país durante las primeras semanas de la expansión del nuevo virus.
En España hasta este domingo se han registrado casi 80.000 casos positivos de coronavirus y más de 6.500 fallecidos, de manera que es el cuarto país más afectado del mundo, tan solo por detrás de EE.UU. Italia y China, donde se originó la pandemia.