Arabia Saudia ha solicitado a los miembros del formato OPEP+ y más países a realizar una reunión de emergencia para equilibrar el mercado petrolero, asegura la agencia oficial saudita.
Riad ha destacado que desea "buscar un acuerdo justo que restaure el equilibrio deseado de los mercados petroleros" como parte de sus "continuos esfuerzos" por apoyar la economía global "en esta coyuntura extraordinaria".
Por su parte, el presidente de EE.UU., Donald Trump, escribió en Twitter que espera que Rusia y Arabia Saudita recorten su producción de petróleo al menos en 10 millones de barriles, algo que "sería magnífico para la industria de crudo y gas".
Este mandatario también señaló que acababa de hablar con el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salmán, después de que ese aspirante al trono de su país hubiera conversado con el presidente de Rusia, Vladímir Putin.
Sin embargo, el portavoz del presidente de Rusia, Dmitri Peskov, desmintió que el inquilino del Kremlin hubiera contactado con Riad para charlar sobre ese tema.
El tuit de Trump provocó que el precio de los futuros de junio para el petróleo Brent llegara a subir un 46,7 %, alcanzando los 36,29 dólares por barril en la bolsa londinense ICE Futures, aunque más tarde el crecimiento se desaceleró. Entretanto, el precio del West Texas Intermediate (WTI) subió en un 34,86 % en el pico del crecimiento, situándose en los 27,39 dólares por barril.
Acuerdo fracasado
El pasado 6 de marzo, la OPEP propuso a los integrantes del pacto OPEP+ realizar un recorte adicional de la producción petrolera de 1,5 millones de barriles por día en respuesta a la reducción de la demanda mundial de hidrocarburos debido a la epidemia del coronavirus.
No obstante, las partes no lograron llegar a un acuerdo. En respuesta al fracaso del pacto, Arabia Saudita realizó el recorte de precios oficiales más drástico en al menos 20 años y comunicó a los compradores que aumentará su producción de crudo en hasta 2 millones de barriles por día. La medida de Riad provocó la dramática caída de los precios del petróleo, lo que llevó al desplome de los mercados financieros en todo el mundo.