El Gobierno de Canadá ha anunciado este jueves que ha decidido levantar la congelación sobre la exportación de armas a Arabia Saudita, y ha revisado el polémico contrato para la venta de vehículos blindados de General Dynamics Corp a Riad por valor de 14.000 millones de dólares.
El ministro de Relaciones Exteriores del país, Francois-Philippe Champagne, ha señalado a través de un comunicado, citado por Reuters, que las "mejoras significativas" al contrato asegurarán miles de empleos en la sucursal canadiense de la citada empresa estadounidense.
Con esa decisión, el gobierno liberal ha pasado a marcar un retraimiento del primer ministro, Justin Trudeau, quien afirmó en diciembre del 2018 que estaba buscando una forma de salir del acuerdo. Asimismo, un mes antes, Ottawa había congelado nuevos permisos en espera de una revisión.
Por su parte, grupos de derechos humanos junto a los opositores políticos, habían insistido en que Canadá debía anular el acuerdo suscrito por el anterior gobierno conservador en el 2014, recordando el asesinato del periodista Jamal Khashoggi y la participación de Arabia Saudita en la guerra de Yemen.
Champagne también ha aclarado que Canadá posee el derecho de retrasar o cancelar los permisos sin penalización, en caso de que se descubriera que Arabia Saudita utiliza los vehículos para un propósito distinto al declarado.
"Esto no es una carta blanca para cualquiera que quiera exportar algo a Arabia Saudita", agregó el político.
Cabe mencionar que el acuerdo se firmó a pesar de una disputa entre las dos naciones, que tuvo lugar en agosto del 2018, después de que Canadá criticara al país árabe por los derechos humanos. En ese contexto, la oposición de 'Los Nuevos Demócratas' anunció que Ottawa estaba "enviando vehículos blindados a un régimen autoritario antidemocrático con un terrible historial de derechos humanos" y exigió anularlo.
"Estamos preocupados por la situación de los derechos humanos en Arabia Saudita, particularmente con los derechos de las mujeres", confirmó Champagne.
No obstante, el ministro aclaró que cancelar el acuerdo conllevaría multas considerables y enfatizó que la cláusula penal podría haber supuesto el valor total del acuerdo. Asimismo, la declaración se produjo el mismo día en que Canadá informó de pérdidas récord de empleos en medio del brote de coronavirus.