Ecuador anuncia suspensión gradual de la producción de petróleo tras rotura de dos oleoductos
Ecuador ha decidido suspender gradualmente la producción de petróleo, luego de la rotura de dos oleoductos, informó este jueves el ministro de Energía y Recursos Naturales No Renovables, René Ortiz.
"La suspensión va gradual, hasta que se llenen los tanques" de almacenamiento en la región de la Amazonía ecuatoriana, donde se extrae el petróleo, principal producto de exportación del país, del cual se producen 535.000 barriles diarios", dijo Ortiz, en una entrevista con Radio Quito.
Sin embargo, señaló que "las exportaciones de crudo continúan gracias a las reservas que se mantienen en el puerto de Balao", en la provincia costera de Esmeraldas, al noroeste del país.
"Hay compromisos de cumplimiento, de programación anterior hasta cuando se termine ese almacenamiento", enfatizó.
La medida se tomó luego de que el pasado 7 de abril, un hundimiento de tierra en la localidad de San Rafael, en el límite de las provincias Sucumbíos y Napo, en la Amazonía ecuatoriana, causara el rompimiento de dos tramos del Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) y del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP), que transportan el petróleo desde esa zona a Esmeraldas.
Adicionalmente, Petroecuador informó que se vio afectado el Poliducto Shushufindi-Quito, que transporta derivados.
VIDEOResumen de los efectos del hundimiento del SOTE en San Rafael y la subsecuente contaminación del rio Coca y Napo, las comunidade sribereñas necesitan atención urgente pic.twitter.com/5jQX5N06DJ
— CONFENIAE (@confeniae1) April 8, 2020
Los trabajos de reparación de estas tuberías están previstos que culminen a finales de abril, y de inmediato se retomará el bombeo.
Aunado a ello, Petroecuador informó que se suspendieron las actividades en la Unidad de Fraccionamiento Catalítico Fluidizado (FCC) por al menos seis días, debido a un daño en un compresor durante una falla del Sistema Nacional Interconectado (SNI).
Alerta por contaminación
La Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía Ecuatoriana (CONFENIAE) denunció la contaminación de los ríos Coca y Napo, "poniendo en grave riesgo el abastecimiento de agua para las comunidades ribereñas".
"Oficialmente, más de 97.000 personas, residentes de los cantones Francisco de Orellana y Aguarico se han quedado sin servicio de agua potable, debido a la suspensión de la captación de agua de los ríos Coca y Napo", señalan en un comunicado.
El desastre ambiental ocurre justamente cuando el país atraviesa una crisis por la pandemia de coronavirus.
Ante ello, desde la CONFENIAE señalan que "privar del agua a las poblaciones indígenas en medio de la situación de emergencia por la crisis sanitaria, solo puede ser calificado como un atentado al derecho más fundamental: el derecho a la vida", añaden en el texto.