Casi 170 españoles desembarcan en Barcelona tras más de un mes confinados en un crucero

La semana pasada Francia denegó su atraque en Marsella, a pesar de que se encontraban a bordo alrededor de 400 ciudadanos franceses.

Este lunes han desembarcado en Barcelona 168 españoles, así como pasajeros de otras nacionalidades europeas, que estaban navegando en un crucero desde el mes de enero y que se encontraban confinados en el navío desde el pasado 15 de marzo debido a las restricciones por la crisis del coronavirus.

El Gobierno de España, gracias a una autorización especial del Ministerio de Sanidad, ha permitido que los pasajeros españoles pudieran regresar a sus domicilios. Se ha tratado de una excepción a la normativa que prohíbe de manera general el atraque de cualquier barco en puertos españoles para frenar la epidemia que azota al país, que ya contabiliza más de 200.000 infectados y 20.000 víctimas mortales de covid-19.

A los pasajeros de otras nacionalidades se les han ofrecido facilidades, así como medios de transporte, para que puedan desplazarse a sus respectivos países desde el puerto de Barcelona, mientras que cada uno de ellos ha sido sometido a controles sanitarios durante el desembarco.

El barco, llamado Deliziosa, pertenece a la compañía italiana de cruceros Costa Crociere. La empresa ha informado de que el navío, que había zarpado con 1.831 pasajeros a bordo, así como con 898 miembros de la tripulación, no transportaba a ningún pasajero positivo en covid-19.

Los puertos de Omán y Seychelles, entre otros, no permitieron el atraque del crucero. Después, la semana pasada, fue Francia la que se negó a que atracara el navío en Marsella, a pesar de que transportaba a 400 ciudadanos franceses, que ahora tendrán que volver a sus hogares desde Génova, el destino final del crucero tras su parada en Barcelona.