Una fotografía que circula en la Red en la que posan miembros de la Guardia Nacional mientras comen con presuntos delincuentes ha causado mucha polémica en México, generando reacciones del titular de la corporación y de un gobernador estatal, que prometieron investigar los hechos.
En las fotografías, se observa a seis elementos de la Guardia Nacional comiendo con integrantes de la familia Valencia Ávila, quienes estarían relacionados con el robo de hidrocarburos en Puebla, una actividad en la que participan diversas organizaciones criminales y que dejó pérdidas al Gobierno por 147.000 millones de pesos (más de 5.848 millones de dólares al día de hoy), entre 2015 y 2018.
De acuerdo con medios locales, la fotografía fue difundida por el hijo de Vicente Valencia Ávila, quien es alcalde del municipio de Venustiano Carranza, en la Sierra Norte de Puebla.
Polémica
Este viernes, el general Luis Rodríguez Bucio, primer comandante de la Guardia Nacional, informó que la Unidad de Asuntos Internos de la corporación inició una investigación a raíz de la fotografía.
"Se tendrá que definir la sanción que corresponda a este personal por la acción que tuvieron de reunirse con gente que públicamente se menciona que está relacionada con grupos de la delincuencia organizada", dijo el general Rodríguez Bucio durante una conferencia de prensa en la que acompañó al presidente Andrés Manuel López Obrador.
El comandante de la corporación dijo que una vez que concluya la investigación, se informará sobre la "sanción que se les aplique a este personal". El miércoles, la Guardia Nacional también anunció que investigaría "las condiciones y el objetivo" de la reunión.
La familia Valencia Ávila
Tres hermanos de la familia Valencia Ávila han gobernado consecutivamente el municipio de Venustiano Carranza, aunque siempre rodeados de polémica.
En agosto de 2018, la esposa del alcalde de ese momento, Rafael Valencia Ávila, fue detenida por los delitos de portación de armas de fuego y robo de combustible, aunque más tarde fue liberada.
Un año después, el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, del oficialista Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), hizo referencia a la familia Valencia Ávila como "una banda que se habían vuelto sicarios del poder público de los panistas, bandas de criminales desde el poder público municipal".
En octubre de 2019, la Policía estatal de Puebla finalmente tomó el control de la seguridad pública del municipio Venustiano Carranza, tras los señalamientos de que la familia Valencia Ávila participaba en diversas actividades delictivas.