El Ministerio de Exteriores de China ha respondido este lunes a las criticas de EE.UU. sobre su gestión de la pandemia, asegurando que Pekín es una "víctima" de la desinformación que rodea el brote del covid-19 y preguntándose al mismo tiempo si Washington "está escondiendo algo" a su población.
"China siempre se opone a las campañas de desinformación. Somos víctimas en lugar de productores de desinformación. La difusión de desinformación y la recriminación no son de ninguna manera la receta para la cooperación internacional antipandémica y deberían ser rechazadas por todos", comentó el ministerio.
Además, la Cancillería china cuestionó la gestión de la pandemia por parte de Washington. "¿Cuándo ocurrió la primera infección en EE.UU.? ¿El Gobierno estadounidense está escondiendo algo? ¿Por qué optan por culpar a los demás? El pueblo estadounidense y la comunidad internacional necesitan una respuesta del Gobierno de EE.UU.", afirmó.
China bajo presión
Hace dos semanas, China se convirtió en víctima de varias acusaciones en relación al origen y las fases tempranas de la propagación del virus. El 14 de abril, el Comité de Seguridad Nacional del Senado estadounidense lanzó una investigación sobre cómo se inició la pandemia. En una entrevista, el presidente de este comité, Ron Johnson, llegó a sugerir que el patógeno podría proceder de un laboratorio chino.
El día siguiente, Donald Trump, quien ha acusado repetidamente al país asiático de ocultar información sobre el brote, afirmó que el número real de muertes por el covid-19 en Wuhan era más alto que el que indican las cifras oficiales. El 18 de abril, el inquilino de la Casa Blanca amenazó a China con "consecuencias" si llegara a demostrarse que Pekín fue "conscientemente responsable" de la pandemia del coronavirus.
La semana pasada, el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, también acusó a China de no reportar a tiempo sobre el brote a la Organización Mundial de Salud (OMS). Según el funcionario, el gigante asiático no informó sobre la propagación comunitaria del virus "durante un mes, hasta que estuvo en todas las provincias dentro de China".
Por su parte, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Geng Shuang, instó la semana pasada a EE.UU. a dejar de culpar a Pekín por la pandemia. "No somos el culpable ni el cómplice del virus", aseguró el vocero en rueda de prensa.