La Policía Federal (PF) de Brasil registró este martes la residencia oficial del gobernador de Río de Janeiro, Wilson Witzel, en el marco de una investigación sobre un supuesto esquema de malversación de fondos públicos destinados a combatir la pandemia del coronavirus.
La operación, denominada Placebo, busca pruebas sobre un posible esquema de corrupción que involucra a una organización social contratada para instalar hospitales de campaña, así como a funcionarios del sistema de salud del estado de Río de Janeiro.
Según los investigadores, la PF trata de encontrar evidencias en el Palacio de Laranjeiras, residencia oficial del gobernador; en la casa donde vivía antes de asumir el cargo; en el Palacio de Guanabara, sede de Gobierno, y en una de las oficinas de la esposa de Witzel.
"Sorprendido e indignado"
En un comunicado, el gobernador negó su participación en un esquema de irregularidades. "No existe absolutamente ninguna participación o autoría por mi parte en ningún tipo de irregularidad en asuntos relacionados con las quejas presentadas por el Ministerio Público Federal", destacó.
Witzel atacó directamente al presidente de la República, Jair Bolsonaro, y se mostró "extremadamente sorprendido e indignado" por el hecho de que "diputados bolsonaristas" anunciasen en los últimos días en las redes sociales una operación de la Policía Federal contra él.
"Demuestra claramente que hubo una fuga [de información], con la construcción de una narrativa que nunca sucedió. La interferencia anunciada por el presidente de la República está debidamente oficializada", criticó.
La operación de este martes tiene lugar un día después de que se nombrase al nuevo superintendente de la Policía Federal (PF) en Río de Janeiro, Tácio Muzzi.
"Interferencia en la Policía"
El cambio del director de la PF y del superintendente de Río de Janeiro fue una de las discrepancias entre Bolsonaro y su exministro de Justicia, Sergio Moro, quien finalmente dimitió acusando al presidente de interferencia política en la corporación. Las graves acusaciones del exministro se están investigando actualmente.
La crisis del coronavirus ha provocado también desavenencias entre Witzel y Bolsonaro, en particular, por las medidas de aislamiento adoptadas en este estado y a las que se opone el mandatario. La semana pasada, en el marco de la investigación sobre la interferencia policial, se hizo público un video de una reunión ministerial en la que Bolsonaro llamaba a Witzel "estiércol" por impulsar el confinamiento.
Río de Janeiro es un de los estados más golpeados por el covid-19 en Brasil, con 4.105 muertes y 39.298 personas contagiadas. El gigante latinoamericano ha registrado en total 374.898 infectados y 23.473 fallecidos, y ocupa el segundo lugar, a nivel mundial, con mayor cantidad de casos, solo detrás de EE.UU. (1.653.390 infectados).