El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha decidido declarar la situación de emergencia a nivel federal en el distrito municipal de Taimyr Dolgán-Nenets de la región de Krasnoyarsk y en el distrito urbano de Norilsk (norte de Siberia, Ártico ruso), donde se registró el derrame de más de 20.000 toneladas de diésel el pasado 29 de mayo.
La fuga en la central termoeléctrica N.º 3 de la empresa energética Norilsko-Taimýrskaya (NTEK, por sus siglas en ruso) se debió a que el fondo de uno de los tanques se debilitó, después de que se asentara el suelo por debajo de la construcción, según los datos preliminares. Además, el Ministerio de Situaciones de Emergencia informó que en el territorio de la central, antes del derrame, se registró un incendio.
Consecuencias
Como resultado del vertido, se contaminó una superficie de casi 180.000 metros cuadrados. Una parte del combustible fue a parar a un arroyo cercano y a los ríos Daldykán y Ambárnaya.
De acuerdo con los datos preliminares del Servicio Federal de Supervisión de Recursos Naturales (Rosprirodnadzor), las concentraciones máximas permitidas de contaminantes en los ríos afectados exceden la norma en decenas de miles de veces.
Respuesta de las autoridades
La necesidad de declarar el estado de emergencia en esta zona ha sido expuesta por el ministro de Situaciones de Emergencia, Yevgueni Zínichev, durante una reunión virtual con el presidente este 3 de junio.
Zínichev ha comunicado a Putin que el Ministerio recibió la información sobre el derrame solo el 31 de mayo, ya que la compañía energética responsable trató de controlar la situación por su cuenta, sin avisar a las autoridades.
El gobernador de la región de Krasnoyarsk, Alexánder Uss, durante la reunión virtual con Putin, indicó que inicialmente los expertos aseguraban que no había peligro de contaminación tras el derrame. "Solo después de que en las redes sociales apareciera información preocupante […] la mañana del domingo se desveló el cuadro real de lo ocurrido", reconoció Uss.
En respuesta, el presidente ruso ha encargado a los funcionarios de seguridad evaluar el trabajo de la Administración de la región. Además, ha pedido reducir el impacto negativo sobre el medio ambiente y resolver el problema de la eliminación de productos derivados del petróleo lo antes posible.
Hasta la fecha, los especialistas del Servicio de Rescate Marino junto con efectivos del Ministerio de las Situaciones de Emergencia recolectaron 100 toneladas del diésel vertido. Además, 800 metros cúbicos de tierra contaminada fueron extraídos del lugar del incidente.
Tras la declaración del estado de emergencia en la zona, los efectivos locales están siendo apoyados con recursos federales. Este 4 de junio, a los 190 efectivos y 35 máquinas que trabajan en el lugar se unirán otras 100 personas del Centro de Rescate de Siberia.
El Comité de Investigación de Rusia ha abierto un procedimiento, que une tres casos penales en virtud de los artículos: 'Daños a la tierra', 'Violación de las normas de protección del medio ambiente en el curso del trabajo' y 'Contaminación del agua'. De momento, uno de los responsables de la central termoeléctrica N.º 3 de la NTEK ha sido detenido.