La Policía de Tulsa, Oklahoma (EE.UU.), reveló el martes 9 de junio los videos de la detención de un joven afroamericano que caminaba por la calle y comenzó una investigación por la violencia empleada por los oficiales.
El hecho ocurrió el pasado jueves 4, cuando dos jóvenes afroamericanos fueron sorprendidos cruzando una calle y dos agentes arremetieron sin mediar palabra contra uno de ellos, al que tomaron con fuerza de los brazos y el cuello y lo esposaron después de tirarlo al piso.
De acuerdo con las imágenes, en ese momento, el otro adolescente pregunta por qué arrestan a su amigo. "Todo lo que estaba haciendo era cruzar imprudentemente la calle", responde un oficial, que agrega: "Solo queremos hablar con él", antes de esposarlo también a él y pedirle que se siente en el borde de la vereda.
El primer detenido es llevado luego al auto patrulla, mientras forcejea y llama "malvados" a los agentes y exclama: "Porque soy negro… soy un criminal. ¡Las vidas negras importan!". Finalmente, el joven que estaba sentado en el cordón de la vereda es dejado en libertad.
Frente a esta situación, Greg Robinson, un activista afroamericano de la comunidad, rechazó que el arresto se debiera a que los jóvenes estaban cruzando mal la calle y vaticinó que las autoridades policiales afirmarán que los oficiales actuaron de acuerdo con los protocolos. "Probablemente lo hicieron. Pero ese es el problema", sostuvo y concluyó: "Sentimos que nos están cazando".
La explicación oficial
El alcalde de Tulsa, G.T. Bynum, declaró que está trabajando junto al Departamento de Policía en la investigación de lo sucedido. "Quiero que todos los chicos en Tulsa se sientan seguros al caminar por la calle en su vecindario. Ningún chico debería temer ser abordado y esposado por caminar en la calle", expresó.
"Sé que los oficiales de esa unidad se centran en quitar las armas ilegales de las calles, pero el objetivo de ese trabajo debe ser que las familias se sientan seguras en su vecindario. Este caso logró lo contrario", lamentó.